“El mundo duda y por eso aumenta el riesgo país”, fue la explicación que halló Mauricio Macri para explicar, en palabras sencillas, la espectacular debacle financiera que esta mañana se desató por la fuga de los inversores de todos los activos argentinos.
Pero “la duda es infundada, porque los argentinos no vamos a volver atrás”. Es decir, que los mercados se estabilizarían si se convencieran que él va a seguir en el gobierno, mientras que la brutal recesión y el rebrote hiperinflacionario pese a un nivel de consumo absolutamente deprimido, no tendrían nada que ver con esa desconfianza externa.
En una entrevista que ofreció durante su visita a Santa Fe, el presidente de la Nación se refirió también a la pobreza y a la inflación, temas en los que consideró que el gobierno está resolviendo porque “estamos atacando los temas de fondo”. También consideró que “se está saliendo lentamente de la recesión” y que su política de exportaciones “es un éxito: no se para de exportar”.