Por la penúltima fecha del Grupo G de la Copa Libertadores, Boca Juniors empató 2-2 con Deportes Tolima. El punto cosechado le permite al equipo de la Ribera esperar confiado el partido de cierre de la zona, que será en la Bombonera, ante Paranaense, y definirá que conjuntos avanzan a los octavos de final.
El Xeneize salió a presionar bien arriba. Con esa actitud generó dos chances de gol en tres minutos. Ambas con protagonismo de Zárate. El ex Vélez interpretó la diagonal de Benedetto y lo puso cara a cara con el arquero. Pero la pierna de Montero interrumpió el viaje al gol del remate del Pipa. Enseguida, Montero volvió a lucirse ante un tiro libre de Zárate.
Todo lo bueno que hacía el Xeneize lo dilapidó Lisando López, al perder una pelota como último hombre ante la presión de Pérez y Castro, y éstos se fueron solitos hasta Andrada, que poco pudo hacer para evitar el 1-0.
A partir del gol, aparecieron los espacios y el cotejo se hizo de ida y vuelta. Pero Boca chocaba con las espectaculares atajadas de Montero y sufría por los desaciertos de su última línea. A los 20, Mas marcó displicentemente a Pérez y éste cabeceó con tranquilidad para poner el 2-0.
El despliegue ofensivo del Xeneize tuvo rédito cuando Zárate descontó, tras una pared con Benedetto. Era muy superior el conjunto de Alfaro, ante un Tolima exageradamente retrasado. Por eso no extrañó que Boca igualara. El 2-2 lo señaló Benedetto de penal, tras la infracción de Mosquera a Nández.
El vertiginoso ritmo con que finalizó el período inicial se calmó en el complemento. Tolima se apoderó de la pelota y manejó el trámite, aunque sin mucha profundidad, más allá de buenos remates de media distancia. Mientras, Boca luchó más de lo que jugó y con el correr de los minutos pareció conformarse con el punto que lo hace depender de sí mismo para pasar a octavos.