El ex vicepresidente de la gestión de Barack Obama, Joe Biden, anunció formalmente su candidatura presidencial para las elecciones de 2020 "en nombre de los valores fundamentales de Estados Unidos". A sus 76 años, Biden lidera las encuestas entre los 20 candidatos que aspiran ser los sucesores de Donald Trump.
"Los valores fundamentales de esta nación... nuestra posición en el mundo... nuestra democracia... todo lo que ha hecho América -América- está en juego. Es por eso que hoy anuncio mi candidatura para la Presidencia de Estados Unidos", escribió Biden en su cuenta de Twitter. El demócrata ya fue aspirante presidencial en 1988 y 2008, aunque perdió en ambas contiendas y luego concurrió junto Obama en sus dos elecciones y mandatos (2009-2017).
"Joe Biden para presidente: América es una idea", dice el video con el que acompañó su lanzamiento el político que había rechazado registrar su candidatura en los últimos comicios para evitar competir con la entonces candidata demócrata, Hillary Clinton. "Consideramos que la verdad es evidente que todos los hombres son creados iguales, dotados por su creador con ciertos derechos inalienables", resalta Biden, al advertir que "nunca la nación ni sus ideales estuvieron más amenazados".
Biden estuvo en el ojo de la tormenta en las últimas semanas porque cuatro mujeres denunciaron haber sido acosadas por él en actos públicos a lo largo de toda su carrera política. Biden reconoció que es asiduo al contacto físico pero afirmó que entendía que los tiempos habían cambiado las normas sociales, sobre todo después del nacimiento del movimiento contra el acoso #MeToo. Por eso prometió que prestaría más atención, pero nunca se disculpó y rápidamente hizo bromas sobre la cuestión.
"A lo largo de mi carrera, siempre he tratado de establecer una conexión humana (con la gente), porque creo que esa es mi responsabilidad. Estrecho manos, abrazo a la gente, agarro a hombres y mujeres por los hombros y les digo, 'pueden conseguir esto'", alegó el ahora candidato presidencial. Los medios locales recordaron también otras polémicas que protagonizó Biden en su rol de senador durante los noventas.
En 1991 fue quien presidió la audiencia en el Senado en la que la abogada negra Anita Hill acusó al entonces candidato a magistrado de la Corte Suprema, Clarence Thomas, de acoso sexual. Sin embargo, Biden hizo testificar a a Hill, ante un panel compuesto exclusivamente por hombres blancos, una decisión de la que luego dijo arrepentirse.
En 1994 también defendió con contundencia una ley contra el crimen que llenó las prisiones de Estados Unidos, que golpeó con fuerza a la población negra. Recientemente Biden reconoció que fue una equivocación.
En 2003 se declaró a favor de la invasión de Irak, aunque después reconoció sus críticas sobre cómo se gestionó el conflicto luego de que Sadam Hussein fue derrocado.