Cuando Mauricio Macri asumió la presidencia el dólar minorista cotizaba 9,76 pesos.Al mediodía llegó a valer 47,47 pesos en la mayoría de las casas de cambio de la city porteña, un 386,4 por ciento más que en ese entonces. El cierre de hoy en el Banco Nación fue a 45,90 pesos, un 370,3 por ciento más que el último precio bajo el gobierno de Cristina Fernández. Si la comparación se hace con el dólar ilegal (blue), que en ese momento cotizaba a 14,73 pesos, el salto del billete verde durante el macrismo ya alcanza a 211,6 por ciento. Lo que sigue es un resumen de cómo fue escalando la divisa mientras desde el oficialismo se pregonaba una y otra vez que no había razones para preocuparse.
Diciembre 2015. Luego de prometer que no habría una devaluación, el gobierno eliminó las restricciones cambiarias y la divisa trepó hasta 13,95 pesos. El cierre de ese año fue a 13,41 pesos.
Diciembre 2016. Pese al fuerte déficit de cuenta corriente, el gobierno logró en 2016 mantener el dólar quieto gracias al colchón que le dio la devaluación de diciembre de 2015 y el creciente endeudamiento externo. Debido a ello, la divisa cerró el año en 16,17 pesos.
Julio de 2017. El primer signo de atención se produjo entre fines de junio y principios de julio de 2017. El dólar cotizaba a 16,15 pesos el 14 de junio y en los días siguientes comenzó a trepar hasta alcanzar los 17,40 pesos el 5 de julio. "El dólar flota: sube y baja. Hace un mes hablábamos de lo bajo que estaba. No me preocupa. Claramente, esto beneficia a las economías regionales, a la generación de empleo. Si sucede, es porque hace a un equilibrio en la economía. No hay de qué preocuparse", aseguró Macri en declaraciones a una radio cordobesa.
Agosto de 2017. El miércoles 9 de agosto, a cuatro días de las PASO, el dólar alcanzó el record de 18,05 pesos, pero luego de las elecciones la presión disminuyó y cerró el mes a 17,63 pesos.
Diciembre de 2017. El dólar arrancó el mes a 17,58 pesos, pero rápidamente comenzó a acelerar y el 28 de diciembre llegó a 19,46 pesos, acumulando un incremento de 10,7 por ciento. Al día siguiente descomprimió un poco y terminó cerrando el año a 18,95 pesos.
Enero de 2018. A comienzos de 2018 la divisa siguió subiendo y cerró enero a 19,95 pesos, un 5,27 por ciento por encima del cierre del año anterior.
Abril de 2018. Al inicio del mes el dólar cotizaba a 20,45 pesos y arreciaban las versiones sobre una devaluación. El 25 de abril finalmente comenzó la corrida cambiaria con la venta masiva de Lebac por parte del JP Morgan y el pase a dólares de esos fondos para sacarlos del país. Ese día la divisa estadounidense quedó en 20,55 pesos por la venta inédita de 1472 millones de dólares de las reservas por parte del Banco Central. El mes cerró a 20,90 pesos. "No hay crisis porque suba o baje un poco el dólar", sostuvo entonces el jefe de Gabinete, Marcos Peña.
Mayo de 2018. La corrida se aceleró y, pese a que el Banco Central vendió 2000 millones de dólares adicionales, el dólar se disparó ese mes y cerró a 25,55 pesos, acumulando una suba de 22,2 por ciento en apenas 30 días, por encima del 17,2 por ciento que había aumentado durante todo 2017. "Tranquilos, el dólar va a quedar en 23, que es el dólar conforme a inflación. Yo no le miento a mi electorado", intentó llevar calma Elisa Carrió, en una declaración que al día de hoy le siguen recriminando.
Junio de 2018. Con el financiamiento externo cerrado y con necesidades de dólares para cubrir el déficit y los pagos de deuda, la divisa voló un 16,1 por ciento y cerró el mes a 29,66 pesos, arrastrando consigo al presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, quien fue despedido el 14 de junio y reemplazado por el ministro de Finanzas, Luis Caputo. El 9 de abril, apenas dos meses antes, la autoridad monetaria había asegurado en su informe monetario que "el nivel del tipo de cambio real y la propia acción del BCRA llevan a no prever, en los próximos meses, depreciaciones significativas del peso". Julio de 2018. Como el mercado le cerraba el financiamiento a la Argentina, el gobierno acordó un crédito stand by con el Fondo Monetario Internacional por 50.000 millones de dólares de manera de poder controlar la escalada del dólar y su consecuente impacto en la inflación. A raíz de ello, el dólar cerró el mes a 28,05 pesos, retrocediendo 5,4 por ciento.
Agosto de 2018. La calma duró poco porque en agosto el dólar se volvió a escapar y cerró a 38 pesos, un 35,5 por ciento por encima del mes anterior. "No pasa nada, tranquilos", declaró Macri en medio del derrumbe del peso.
Septiembre de 2018. El dólar siguió subiendo aunque a un ritmo menor y el 25 de septiembre renunció Luis Caputo como presidente del Banco Central. Fue reemplazado por Guido Sandleris. La divisa alcanzó el record de 41,94 pesos el 28 de septiembre.Octubre de 2018. El gobierno modificó la política monetaria y renegoció el acuerdo con el FMI acordando una ampliación de 5700 millones de dólares y un adelanto del cronograma de desembolsos. El dólar cerró el mes a 36,98 pesos, un 11,8 por ciento menos que el mes previo.
Diciembre de 2018. El dólar cerró el año a 38,83 pesos, acumulando una suba de 105,5 por ciento.
Febrero de 2019. Luego de un comienzo de año tranquilo, la moneda estadounidense volvió a despertarse y cerró el mes a 40,14 pesos.
Marzo de 2019. El 7 de marzo el dólar llegó a 43,50 pesos y a los pocos días siguió subiendo para cerrar el mes a 44,40 pesos.
Abril de 2019. El día 5 el dólar alcanzó los 44,96 pesos y hoy llegó a su récord histórico al promediar 47,47 pesos después del mediodía, aunque el cierre fue a 45,90 pesos en el Banco Nación tras otro aumento de la tasa de interés del Banco Central, que quedó en 71,03 por ciento.