Durante casi toda la jornada del viernes el hashtag #ConfirmenARamosPadilla se convirtió en el primero a nivel nacional en Twitter. Tiene que ver con el rumor de que la Cámara Federal de Mar del Plata desguazaría la causa de Dolores dejándole al juez federal de esa ciudad sólo el caso de la extorsión al empresario Pedro Etchebest y mandaría el resto del expediente a otras jurisdicciones. Por ejemplo, las operaciones en Necochea a la justicia de esa ciudad; las maniobras con la banda narco Los Monos a Santa Fe; el espionaje ilegal de Corrientes a esa provincia y buena parte del resto a Comodoro Py. Durante la mañana de ayer, el fiscal Juan Manuel Pettigiani dictaminó a favor de pasar todo el expediente al edificio de Retiro y ahora habrá tres días hábiles para que opinen las partes. Por lo tanto, la Cámara resolverá el próximo viernes o durante la semana siguiente. Habrá que ver la letra chica de ese fallo, pero chiste que circula es que “está en marcha La Gran Carzoglio” –en referencia al juez de la causa que involucró a los Moyano–, o sea que la AFI intenta “influenciar” a los camaristas. Por lo pronto, lo que se resuelva en Mar del Plata seguramente será apelado por las querellas y mientras tanto Ramos Padilla seguirá al frente de la investigación. La última palabra la tendrá la Sala II de la Cámara de Casación, con pronóstico reservado.
Desde hace un mes, la coalición judicial-mediática-política, alineada con Cambiemos, puja con desesperación por sacarle el expediente a Ramos Padilla. El magistrado viene avanzando en forma rauda y demuestra todas las operaciones que se hicieron contra el kirchnerismo –también contra el radicalismo–, además de extorsiones, coacciones e incluso el seguimiento del ex marido de la actual esposa del fiscal Carlos Stornelli. De hecho, es precisamente Stornelli –el fiscal estrella del macrismo– el que se esfuerza denodadamente por llevar la causa a Comodoro Py. Stornelli cumplirá mañana un mes en rebeldía, un hecho inédito ya que se trata de un fiscal que no está a derecho. También el avance del expediente apunta contra el periodista Daniel Santoro, quien aparece íntimamente vinculado con Marcelo D’Alessio y buena parte de los hechos protagonizados por la banda. Ramos Padilla ha sido cauto, pero por pedido del fiscal Juan Pablo Curi la semana pasada ordenó investigar el teléfono de Santoro. El periodista de Clarín dijo públicamente que había borrado chats y contactos.
Desde el jueves empezó a circular la versión de que la Cámara de Mar del Plata desmembraría el expediente de Dolores, una movida que le quita el sentido central a la investigación ya que lo que se investiga es el accionar de una banda que hizo una gran cantidad de operaciones en distintos lugares del país. Así como espió al ex gobernador radical, Ricardo Colombi de Corrientes, también a dos miembros de la Corte Suprema. Coaccionó testigos, abogados, mandó a hacer cámaras ocultas; extorsionó empresarios para que paguen sumas siderales de dinero o vendan sus empresas y hasta movió dinero en el exterior en presuntas operaciones de lavado. Un punto clave es el vínculo de la banda con el Estado, en particular con la AFI. Desguazar la causa es considerar que son todos hechos aislados.
Ayer finalmente no se realizó en Mar del Plata la audiencia para que la camaristas escuchen al fiscal y a los abogados de Stornelli. Todos enviaron escritos, por lo que no hizo falta. El fiscal Pettigiani apoyó el pedido de su par de Dolores y reclamó que el expediente viaje a Comodoro Py, lo mismo que pide Stornelli. El argumento de Pettigiani es que casi todos los imputados viven en Buenos Aires y casi todos los delitos se cometieron en territorio porteño o sus alrededores, por lo que regiría la economía procesal. Pettigiani no admite el argumento de Ramos Padilla de que los delitos se cometieron en numerosos lugares: Pinamar, Capital Federal, Rosario, Corrientes, Montevideo y hasta Estados Unidos o las Islas Comodores, lo que suele suceder con el delito sofisticado. Por lo tanto –dice Ramos Padilla– también rige el criterio de que debe instruir la causa el juez que tiene la investigación más avanzada.
Ahora se abre la posibilidad de que todas las partes opinen, es decir los abogados de los extorsionados, coaccionados y espiados ilegalmente. Tienen tres días hábiles, de manera que teniendo en cuenta el feriado del miércoles, el plazo se extiende hasta las dos primeras horas del viernes. De ahí en adelante, los jueces Eduardo Jiménez y Alejandro Tazza quedarán en condiciones de resolver. Seguramente lo harán a mediados de mayo. Se dice que el partidario del desguace de la causa es Jiménez mientras que Tazza se opone. El que desempataría es el juez federal de Necochea, Bernardo Bibel, de perfil muy conservador. Por eso el rumor del desguace está instalado desde el jueves, lo que produjo una fuerte reacción Twitter. Que la Cámara Federal de Mar del Plata le quite gran parte de la causa a Ramos Padilla no significa que el juez tenga que entregar el expediente de inmediato. Habrá apelación de casi todos los querellantes, entre ellos los extorsionados, los abogados espiados y a los que se les pretendía hacer las cámaras ocultas y los coaccionados a declarar en causas judiciales. Eso significa que la cuestión de la competencia llegará a la Cámara de Casación. En esa instancia interviene la Sala II integrada por Angela Ledesma, Alejandro Slokar y Guillermo Jacobucci. Ellos tendrán la palabra decisiva para romper una especie de paridad. El juez sostuvo su competencia porque los hechos ocurrieron en muchos distritos y es quien tiene la investigación más avanzada. La Cámara, en cambio, dictaminaría la incompetencia, aunque por ahora es sólo un rumor. De todas maneras, la Casación dirimirá el tema. Mientras tanto, Ramos Padilla podrá seguir investigando, como mínimo, un mes más.
En Comodoro Py empezó a circular la humorada sobre “la gran Carzoglio”. La frase pinta la ofensiva de la AFI para “convencer” a los camaristas. Días atrás, los titulares de la central de espías admitieron en el Congreso que enviaron a dos jefes de la AFI a visitar al juez de Avellaneda Luis Carzoglio para preguntarle qué quería para detener al camionero Pablo Moyano.