En línea con su peculiar sentido de justicia, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, recibió ayer a la tarde al médico Lino Villar Cataldo, quien fue declarado no culpable del homicidio de un joven que lo asaltó en Loma Hermosa en 2016, y le garantizó protección para él y su familia ante la amenazas que dijo haber recibido desde que ocurrió el hecho.
La funcionaria se reunió con Villar Cataldo en la sede de la cartera ubicada en el barrio porteño de Recoleta. Durante el encuentro también estuvo presente el jefe de Gabinete del ministerio, Gerardo Millman, y el abogado del médico, Diego Szpiegel.
“Como ministra de Seguridad, lo que necesite el doctor para su seguridad, la de su familia y la de sus cuatro hijos, va a tenerlo. Porque queremos que cuando en la Argentina hay justicia, nadie quiera hacer venganza”, sostuvo Bullrich.
Mirando a Villar Cataldo, parado a su lado, le dijo: “Usted esperó dos años y medio a esta Justicia y la tuvo, cuente con los recaudos que el Ministerio puede poner para usted y su familia”.
Sobre lo que le sucedió al médico, la ministra consideró que “tuvo que defenderse de una manera que no es la que uno le gusta, pero que era su vida o la del delincuente”.
“Nosotros mantenemos la filosofía que mantenemos siempre, la sostenemos para Cataldo y para todos los casos en los que creemos que hay legítima defensa o cumplimento del deber”, afirmó y dijo que este caso va a sentar jurisprudencia como el del carnicero que mató a un ladrón en Zárate. Más adelante manifestó su esperanza de que el caso de Villar Cataldo influya en el caso Chocobar (el policía de franco condenado porque mató por la espalda a un ladrón que estaba en el piso): “No es influir sobre los jueces, es influir sobre la política criminal de nuestro país. Nosotros queremos que en la Argentina no se confunda y las cosas... No vivamos en le mundo del revés. Esa es nuestra filosofía y la vamos a defender totalmente, en todos los casos y todos los días”.
El médico le agradeció a la ministra sus palabras y que siempre haya manifestado que “no hay que transformar a la víctima en victimario”. “Y efectivamente es un hecho real. Fue un hecho no buscado por mi, fue un hecho desgraciado porque siempre me formé para salvar vidas y en este caso se perdió una vida. No importa que es un delincuente”, remarcó.
Villar Cataldo insistió: “Yo sigo teniendo temor por mi y por mis hijos, que tienen que salir a trabajar. Entonces al principio hubo mucha amenaza hacia la vida de ellos y hacia mí, que tarde o temprano iban a vengarse”.
Pese a lo sucedido, el médico defendió la utilización de armas y enfatizó: “El uso de armas es una decisión personal, como legítimo usuario no estoy violando ninguna ley. Simplemente cumplí con todos los requisitos que tiene que tener un ciudadano para tener un arma en la casa”. Aunque reconoció: “No soy portador, la puedo tener dentro de mi domicilio”.
Villar Cataldo fue declarado ayer no culpable del homicidio de Ricardo “Nunu” Krabler (24) por un jurado popular, al cabo de un juicio que se había iniciado el lunes último en el Tribunal Oral Criminal 3 de San Martín.
Los doce jurados, presididos por una mujer, coincidieron en absolver al médico del delito de “homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego” por el que fue acusado por la querella, y “homicidio con exceso en la legítima defensa” que pretendió imponer la fiscalía.
El hecho juzgado ocurrió el 26 de agosto de 2016, cerca de las 20, cuando el médico se retiraba con su Toyota Corolla de su consultorio de Loma Hermosa, y fue abordado por Krabler.
Según dio por probado la fiscalía, el asaltante le dio un culatazo en la cabeza, se subió al vehículo del médico con fines de robo y terminó muerto de cuatro balazos efectuados por el imputado con una pistola Bersa Thunder Pro calibre 9 milímetros.