El Barcelona se proclamó esta tarde campeón de España por 26ª vez en su historia y retuvo el título logrado en 2018. Un gol de Lionel Messi en la segunda parte le sirvió para imponerse 1-0 a Levante como local, mantener la diferencia de nueve puntos sobre su escolta Atlético de Madrid con tres fechas por disputarse y asegurarse el título gracias a la diferencia de gol en partidos entre ambos (1-1 en el Wanda Metropolitano y 2-0 en el Camp Nou).
El equipo de Diego Simeone se había impuesto a primera hora al Real Valladolid por 1 a 0 y, con ese resultado, los catalanes estaban obligados a ganar para poder ser campeones. A pesar de ello, Messi fue al banco; algo que no duraría demasiado tras el primer tiempo sin goles. Al inicio del complemento, el DT Ernesto Valverde lo mandó a la cancha en lugar de Philippe Coutinho.
Quince minutos después, el rosarino resultó determinante en la jugada que definió el partido y le aseguró el campeonato a los suyos. Tras una serie de rebotes en el área rival, el chileno Aturo Vidal lo habilitó de cabeza para que Messi, luego de dejar pasar a dos rivales casi sin esfuerzo, saque un remate cruzado para poner el 1-0 y dar lugar al delirio de los presentes. De ahí en más, a Barcelona sólo le quedó aguantar los esporádicos ataques de Levante para, una vez terminado el encuentro, levantar el trofeo frente a su público y desatar los festejos.
Lo de hoy puede ser el comienzo de un triplete histórico que se dio en 2009 y 2015. Como entonces, busca sumar, en un mismo año, Liga, Copa del Rey y Champions League. El mes que viene jugará la final de la Copa del Rey ante Valencia, en Sevilla. Mientras que este miércoles, recibirá a Liverpool en el Camp Nou por el encuentro de ida de las semifinales de la máxima competencia europea.