El plantel de fútbol de Instituto de Córdoba, actualmente en la Primera B Nacional, no se entrenó ayer por atrasos salariales correspondientes a noviembre y diciembre pasados, según comunicaron los jugadores por medio de un escrito. “No es lo que hubiésemos querido, pero se llegó a una situación que es límite porque hay compañeros que no pueden pagar los alquileres. Es un momento complicado. Esperamos acordar algo con los dirigentes”, expresó el volante Paulo Rosales a Radio Impacto.