El Tribunal Oral Federal 1 de San Martín comenzará a juzgar hoy a diecisiete militares, gendarmes, policías y civiles de inteligencia por delitos de lesa humanidad con epicentro en la guarnición militar de Campo de Mayo. Se trata del 17º proceso oral y público por secuestros, tormentos, homicidios y apropiaciones de bebés en el que fuera el mayor centro de torturas y exterminio de la última dictadura, donde paradójicamente funciona hoy una unidad penal ad hoc que aloja a más de 70 viejos represores. La lista de acusados incluye a íconos del terrorismo de Estado como el ex jefe de esa guarnición Santiago Riveros, que acumula múltiples condenas, pero también a actores centrales del genocidio que todavía no fueron sentenciados como el coronel Benito Angel Rubén Omaecheverría, de 91 años, quien como jefe de personal del Comando de Institutos Militares tuvo en sus manos día a día los listados de secuestrados en El Campito, o el célebre torturador Carlos Francisco Villanova, ex miembro de la Dirección de Inteligencia de la Policía Federal comisionado al Batallón 601 del Ejército, quien con los alias “Gordo 1”, “Doctor” o “Tordo” interrogó a cientos de militantes montoneros en Campo de Mayo, encabezó un grupo de tareas y hasta hace apenas un lustro gozó del anonimato y la impunidad como vecino de Vicente López.
Por Campo de Mayo se estima que pasaron unas 5 mil víctimas, de las que pocas salieron con vida. El juicio que arranca a las 9.30 en la sala de audiencias de Pueyrredón 3728, en San Martín, comprenderá los casos de 323 secuestrados entre 1976 y 1978, incluidos trabajadores ferroviarios y operarios de Mercedes Benz. Muchos de los secuestros por los que declararán más de 700 testigos ocurrieron en el cordón industrial de Zárate, Campana y Escobar. Entre las víctimas se incluyen además los casos de 14 embarazadas, 9 padres de niños y niñas apropiados y otros 23 casos vinculados con apropiaciones, por los que actuará como querellante la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo.
El tribunal estará integrado por los jueces Daniel Omar Gutiérrez, Silvina Mayorga y Nada Flores Vega. Las audiencias, pese a la edad de imputados y víctimas por las cuatro décadas transcurridas, se desarrollarán apenas una vez por semana, todos los miércoles a las 9.30. Para ingresar (mayores de 18 años) sólo hay que presentar el DNI. Como querellantes, además de Abuelas, actuarán el CELS, el abogado Pablo Llonto y las secretarías de Derechos Humanos de la Nación y de la provincia de Buenos Aires. El fiscal Marcelo García Berro acusará en representación del Ministerio Público Fiscal.
Gracias a la acumulación de causas elevadas al tribunal oral (un viejo reclamo de abogados querellantes y fiscales), el juicio tendrá a 17 acusados en el banquillo, el mayor número desde que se reabrieron las causas de lesa humanidad. Entre los represores de mayor jerarquía en el Estado terrorista, además de Riveros y Omaecheverría, estarán Eugenio Guañabens Perelló, ex director de la escuela “General Lemos”, Luis Sadi Pepa, ex director de la Escuela de Comunicaciones y jefe del área 420, y Carlos Javier Tamini, ex jefe de la División Contrainteligencia del Departamento II del Comando de Institutos Militares. También estarán en el banquillo el gendarme Hugo Miguel Castagno Monge, ex jefe de los celadores del Escuadrón Campo de Mayo de esa fuerza, que custodiaba a los secuestrados en El Campito; Carlos Eduardo José Somoza, personal civil de inteligencia (PCI) de la central de reunión de información del Batallón 601 y ex miembro del Grupo de Tareas II; y los ex guardias Roberto Julio Fusco (alias “Pajarito”, torturador de El Campito), Mario Rubén Domínguez y Bernardo Caballero. Por los secuestros en Zárate, Campana y Escobar están acusados Raúl Guillermo Pascual Muñoz, Francisco Rolando Agostino, Pacífico Luis Britos, Federico Ramón Ramírez Mitchell, Alfredo Oscar Arena y Ramón Vito Cabrera.