ATENCIÓN: esta nota contiene SPOILERS sobre el tercer episodio de Game of Thrones
Maisie Williams, la actriz que interpreta a Arya Stark en Game of Thrones, tenía sus reservas sobre cómo sería recibida la batalla con el Night King en el tercer episodio: la intérprete fue entrevistada por Entertainment Weekly tras la emisión del domingo, que vio partir a varios personajes tras la llegada del Ejército de los muertos a Winterfell.
Arya, precisamente, es quien terminó salvando a Westeros al derrotar al Rey de la Noche con la daga de acero valyrio obtenida la temporada pasada de manos de Bran Stark. Williams, de todos modos, no estaba segura de cómo tomarían los fans el hecho de que fuera su personaje quien liquidara al más temible villano de la serie. “Fue increíblemente excitante, pero inmediatamente pensé que todos lo odiaría, que Arya no lo merecía. Lo más difícil en cualquier serie es cuando vas construyendo un villano que parece imposible vencer… y entonces lo vencés”.
“Tenía que hacerse de una manera muy inteligente”, señaló Williams. “Porque si no la gente iba a pensar que ‘bueno, el villano no es tan malo si una chica de 50 kilos viene y lo apuñala’. Tenés que hacerlo bien. Cuando le dije a mi novio él decía ‘Hmmm… ¿no debería ser Jon?”. La actriz señaló que la idea se cimentó cuando recordó la conversación con Melisandre en la temporada 3, en la que la hechicera roja de algíun modo predijo lo que pasaría. “Cuando hicimos el diálogo con Melisandre me di cuenta que todo era el resultado de lo que fuimos construyendo en las últimas seis temporadas, o cuatro si se considera desde que Arya llega a la Casa de Negro y Blanco. Todo llevaba a este único momento. También fue inesperado, y es algo que este programa siempre hace. Así que dije ‘Jodete, Jon. Me toca a mí’”. Han sido días destacados para Williams: la semana pasada reveló que pensó que su primera escena de sexo, en el episodio 2 de esta octava temporada, era una broma pesada de los showrunners David Benioff y DB Weiss.
Mientras tanto, el jefe de fotografía de “The Night Long” se refirió a las quejas de varios espectadores sobre la “oscuridad” del episodio. En declaraciones al sitio TMZ, Fabian Wagner defendió la estética y señaló que “sé que no era demasiado oscuro porque yo lo fotografié”. Según el integrante del equipo, desde el principio se pretendió que las escenas de batalla desorientaran como un eco de los combates reales, pero no para “confundir” al espectador.
El realizador de fotografía, que ha trabajado en otros episodios de Game of Thrones y algunos de Sherlock, recomendó a los espectadores que vean el capítulo en una habitación lo más oscura posible para “optimizar”el visionado, y que eviten la polución lumínica de teléfonos y otras fuentes. Wagner también señaló que la oscuridad del episodio también puede deberse a la compresión efectuada en el material.
Tras la gran batalla contra los muertos, el trailer del episodio 4 vuelve a situar la atención en la puja por el Trono de Hierro: “Ganamos la gran guerra. Ahora vamos a ganar la última guerra”, dice Daenerys Targaryen, mientras en King’s Landing se ve a Cersei Lannister y Euron Greyjoy alistando sus propias tropas.
De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
