Las acciones argentinas registraron un rebote importante en el cierre de la semana. La bolsa porteña registró un incremento del 5,2 por ciento. Se trata de la mayor suba diaria en los últimos seis meses. Las empresas venían muy golpeadas en las últimas semanas por la inestabilidad del tipo de cambio y la fuerte incertidumbre financiera. Los anuncios de estos días de controlar en forma directa con reservas la cotización de la divisa fueron un motivo de alivio principalmente para los bancos. Las entidades financieras fueron algunas de las que más subieron en la jornada de ayer con aumentos de más del 10 por ciento. El riesgo país volvió a bajar y finalizó en 926 unidades. La semana pasada superó los 1000 puntos.
En Nueva York las empresas argentinas registraron importantes incrementos. Se destacó el avance del 10,1 por ciento del Banco Macro. En la lista continuaron las subas del 7,5 por ciento del Supervielle, del 7,2 por ciento del Frances y del 6,0 por ciento del Galicia. Las energéticas fueron otras firmas con importantes aumentos. Resaltó el avance de Pampa Energía (6,2 por ciento), Central Puerto (5,0 por ciento) y Transportadora Gas del Sur (2,6). Entre las empresas argentinas sobresalió también el avance de 20,0 por ciento de Mercado Libre (ver aparte). Esta compañía excede a la coyuntura local. Presentó sus balances con operaciones mayormente en Brasil y en México que el mercado tomó en forma positiva.
El dólar, en tanto, se ubicó en 45,55 pesos y marcó un retroceso de 40 centavos. El Banco Central bajó la tasa de interés levemente por primera vez en diez jornadas. Se renovaron ayer 191 mil millones de pesos con un rendimiento del 73,76 por ciento. Este jueves la tasa se había ubicado en 74,07 por ciento (marcando su máximo desde la crisis de 2002). Las reservas internacionales finalizaron en 71.291 millones de dólares y acumularon una baja de 237 millones de dólares en la semana. La pérdida de divisas de la autoridad monetaria empezó a ser un elemento de preocupación en el último mes. Desde los primeros días de abril ya se perdieron más de 6000 millones de dólares. Esto implica que ya se gastó más del 50 por ciento del último tramo del préstamo desembolsado este año por el Fondo Monetario Internacional. Los pagos de deuda externa fueron el principal elemento para explicar esta caída de las reservas.