El homenaje del centenario del nacimiento de Eva Duarte de Perón en Los Toldos logró aglutinar a dirigentes de un peronismo diverso que hace mucho no posaba en una misma foto. Fue el cierre de dos jornadas junto al monumento a Evita en la estación ferroviaria de su ciudad natal. Allí confluyeron autoridades del PJ como José Luis Gioja (Nacional), Fernando Gray (Buenos Aires), Víctor Santa María (CABA), el ex presidente interino Eduardo Duhalde, varios intendentes del conurbano bonaerense como Verónica Magario (La Matanza), Gustavo Menéndez (Merlo), Gabriel Katopodis (San Martín) y Walter Festa (Moreno) entre otros, el precandidato presidencial Daniel Scioli, diputados kirchneristas como Cristina Alvarez Rodríguez, Mayra Mendoza y Mónica Macha, Leonardo Grosso del Movimiento Evita y sindicalistas como Hugo y Pablo Moyano (Camioneros) y Roberto Baradel (Suteba), junto a decenas de dirigentes de distintas vertientes del peronismo. Una “señal de unidad” -como definieron voceros justicialistas- de cara a la elección de octubre.
Muchos de ellos estuvieron desde el día previo, en la “vigilia”. En tanto, otros llegaron ayer a Los Toldos, en el día del centenario del nacimiento de Evita. El cierre se dio tras la colocación de la ofrenda floral en el busco de Eva Perón en la plaza céntrica de la ciudad. Desde ahí arrancó la caminata de decenas de dirigentes y militantes justicialistas de diversas corrientes internas hasta la estación ferroviaria. Allí, junto al monumento de Evita, sin discursos y declaraciones políticas, todos posaron para la foto como una muestra de vocación de unidad con la vista puesta en las elecciones presidenciales de octubre.
También se mezclaron para la foto ex funcionarios kirchneristas como Débora Giorgi y Sergio Berni, sindicalistas como Omar Plaini (Canillitas) y Francisco “Barba” Gutiérrez de la UOM y precandidato a intendente de Quilmes, el diputado Fernando Espinoza; el ex diputado Carlos Kunkel y legisladores bonaerenses como Florencia Saintout, entre muchos otros. Tampoco hubo disputa por lugares preferenciales. Nadie desentonó en el gesto unitario del peronismo, mayoritariamente bonaerense.
Antes, había sido el acto más formal y de características institucionales de todas las actividades programadas por el PJ provincial en Los Toldos. El Concejo Deliberante del partido bonaerense de General Viamonte homenajeó a Evita con una sesión especial en la que se la declaró ciudadana ilustre. Allí coincidieron Gray y Duhalde con el intendente macrista, el radical Franco Flexas.
“En estos días tan difíciles que nos obligan a vivir, tengamos más que nunca presente la fuerza transformadora de Evita, que cambió a la Argentina para siempre”, aseguró Gray.
Luego de la entrega de los arreglos florales en el busto de Evita en la plaza del pueblo, Espinoza afirmó: “Una multitud vino hasta acá porque Evita por sobre todas las cosas es amor. Amor a su patria, amor a su pueblo. Evita traspasó las fronteras y es conocida en todo el mundo como el emblema de la justicia social”.
Pero la vigilia y la convocatoria peronista también tenían como objetivo declarado el que la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal, no buscara apropiarse del homenaje. Desde el entorno de la gobernadora habían dejado trascender su intención de llegar a Los Toldos para el homenaje a Evita. Eso finalmente no sucedió. La recepción que le podría haber ofrecido el peronismo bonaerense en un gesto inédito de unidad no hubiera sido la más conveniente para la gobernadora de Cambiemos que busca su reelección.
La vigilia del día anterior ya había copado la tranquila ciudad del centro norte bonaerense, ubicada a 257 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires. Los peregrinos peronistas la recorrieron al ritmo de la Marcha Peronista con bombos y bandas de vientos, banderas y otras consignas partidarias.
El lunes hubo intervenciones artísticas en la estación de trenes; en pleno centro de la Ciudad se proyectó el documental Eva Perón, jirones de su vida, 100 años, dirigido por el historiador Felipe Pigna; y los espectáculos artísticos encabezados por mujeres se extendieron durante toda la noche frente a la casa natal de Evita. Fue la antesala para una foto que el peronismo bonaerense no tenía hace años y que se dio en el centenario del nacimiento de una de las figuras centrales en la historia del justicialismo.