Pese a las denuncias por precios inflados para las compras con crédito, el secretario de Comercio, Miguel Braun, continuó con su cruzada personal en defensa del programa Precios Transparentes, que implicó incrementar el costo de las cuotas. “Los precios de contado estuvieron inflados mientras que ahora se trabaja con reglas claras, de modo que los comercios y los bancos compitan. “La competencia hace que los consumidores tengan mejores opciones de compra”, afirmó el titular de la cartera de Comercio a través de un comunicado.
El gobierno dispuso un plan que implica hacer constar en las condiciones de compra la tasa de interés anual efectiva, el total de los intereses a pagar o el costo financiero, los montos y el sistema de amortización, entre otros. A esto se suman otras medidas respecto de la publicidad de los productos y las ofertas. El objetivo, según defiende el gobierno, era abaratar el precio de contado a partir de contar con mayor información, y se anticipó una reducción al público del 20 por ciento. Sin embargo, muchos comercios ya habían bajado los precios por la falta de ventas, con descuentos y liquidaciones, con lo cual la medida tuvo casi nulo impacto por el escaso margen de rentabilidad con el que operan estos establecimientos. Pero Braun insiste en defender el programa.
“Con esta medida estamos normalizando los precios y transparentando. Ahora, como consumidores, tenemos la posibilidad de elegir cómo pagamos”, afirmó el funcionario, que aseguró que se sigue trabajando “en tener reglas claras”. “El control de precios arbitrario terminó con 700 por ciento de inflación acumulada, golpeando al que menos tiene. No creemos que ese sea el camino correcto”, afirmó en alusión al plan de Precios Cuidados que aplicó el gobierno anterior. “Trabajamos en la transparencia y en defender la competencia para que las pymes puedan competir con las grandes empresas, y que los consumidores tengan mejores opciones y reglas claras cuando compran”, dijo Braun.