Abuelas y la Línea Fundadora de Madres de Plaza de Mayo, entre otros organismos de derechos humanos, expresaron ayer su “preocupación” ante las divulgaciones ilegales de escuchas telefónicas, las que consideraron que “dan cuenta de claras violaciones a las garantías constitucionales” y “evidencian que el aparato de inteligencia continúa operando como una herramienta de presión política y no al servicio de la búsqueda de justicia”. El miércoles por la tarde, representantes de Abuelas, Madres, Hijos, la Asociación Buena Memoria, la Comisión Memoria, Verdad y Justicia Zona Norte, Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas, Familiares y Compañeros de los 12 de la Santa Cruz y la Fundación Memoria Histórica y Social Argentina se reunieron con Parrilli, protagonista de dos charlas telefónicas con la ex presidenta Cristina Fernández que fueron filtradas. Ayer emitieron un comunicado en el que advirtieron que las escuchas a dirigentes políticos “buscan restringir libertades y amedrentar a referentes políticos opositores”, puntualizaron y exigieron al Gobierno nacional y a las autoridades judiciales que “garanticen la privacidad y la libertad de organización política a todos los ciudadanos bajo cualquier signo e ideología”.