La defensa de Marcela Mendoza espera la “pronta resolución favorable” de dos hábeas corpus presentados para pedir la “inmediata libertad” de la mujer. A fines de abril, la Sala I de la Cámara de Casación declaró nulo el fallo por el cual ella había sido condenada a prisión perpetua, acusada de haber provocado la muerte de su ex pareja, Eduardo Gómez, a quien había denunciado varias veces por violencia de género. “Uno de los hábeas corpus tiene como fundamento que un tribunal de rango superior anuló la sentencia condenatoria, de manera que Marcela está detenida sin condena, siendo inocente, y ha superado todos los plazos de la prisión preventiva”, le dijo a PáginaI12 Adrián Rodríguez Antinao, defensor de Mendoza, quien está en prisión desde hace de tres años y nueve meses. “El segundo hábeas corpus es por razones de salud, porque Marcela es celíaca y en la prisión no tiene ni la atención, ni las condiciones mínimas que necesita dado su estado de salud”.
El fallo condenatorio de Marcela Mendoza fue anulado con el voto mayoritario de los jueces Daniel Carral y Ricardo Borinsky, quienes ordenaron la realización de un nuevo juicio. El tercer integrante de la Sala I de Casación, Ricardo Maidana, votó en disidencia con sus colegas y sostuvo que la mujer tiene que ser sobreseída para que pueda recuperar su libertad “en forma inmediata”.
Sobre esa base, además de los dos hábeas corpus, Rodríguez Antinao presentará un recurso extraordinario ante la Suprema Corte de Justicia bonaerense “para que la señora Mendoza sea sobreseída porque surge claro en la causa que ella no provocó el incendio en el que murió su ex pareja, sino que a ella la intentaron matar y pudo salvar la vida”, al escapar del auto en el que se encontraban los dos, propiedad de Eduardo Gómez.
Los hábeas corpus fueron presentados ante el Tribunal Oral 4, integrado por los jueces Juan Carlos Bruni y Emir Alfredo Caputo Tártara, quienes deberían tener a su cargo el nuevo juicio, si es que finalmente se realiza. “Nosotros pensamos que tiene que ser sobreseída sin llegar al juicio y para eso nos vamos a presentar ante la Suprema Corte, pero en el peor de los casos, queremos que llegue al segundo juicio en libertad, como corresponde con alguien que ha sido condenada sin pruebas y que además padece de celiaquía, una enfermedad que requiere de una dieta adecuada que por supuesto no puede ser cumplida en las condiciones carcelarias en las que se encuentra desde hace casi cuatro años y que son insalubres, como han denunciado tantas veces los organismos de derechos humanos”, recalcó el abogado defensor.
Rodríguez Antinao insistió en que “se le tiene que conceder la inmediata libertad porque en su caso no hay peligro de fuga ni hay motivo alguno que impida la continuidad del proceso”. Además de las acciones judiciales, se presentó un proyecto en la Cámara de Diputados de la provincia en la que se expresa la “preocupación por la situación de Marcela Mendoza”. La iniciativa cuenta con el aval del bloque de Unidad Ciudadana-Frente para la Victoria, con la firma de Florencia Saintout, Lucía Portos y Miguel Funes.
En su sentencia de abril, la Sala 1 de Casación dejó sin efecto el fallo condenatorio de Marcela Mendoza, señalando una serie de errores groseros en la sentencia del Tribunal Oral 3 de La Plata, integrado por los jueces Ernesto Domenech, Andrés Vitali y Santiago Paolini, que convalidaron la acusación de la fiscal Silvina Langone. El hecho que se investiga ocurrió el 9 de agosto de 2015, cuando Mendoza salió de su casa para encontrarse con Eduardo Gómez, su ex pareja, quien la citó en un lugar de la ruta 11, en la localidad de Coronel Bavio, partido de Magdalena.
El hombre tenía dos exposiciones por violencia de género y una perimetral, pero ella accedió a verlo ante el temor de que su agresor fuera a su casa, donde vivía con sus hijas. Ella subió al Volkswagen Gol de Gómez, quien falleció al producirse en el vehículo un incendio que, según los jueces del Tribunal Oral 3, habría sido provocado por la mujer, quien sufrió quemaduras en las manos que indicarían que ella fue la agredida y que pudo salvarse porque escapó a tiempo por la puerta del acompañante.
En el juicio, Marcela declaró que él estaba “muy enojado” porque ella no quería retomar la relación y que la había amenazado diciéndole que ese día “todo iba a acabar mal”. La primera persona que llegó al lugar, cuando todavía el auto estaba en llamas, fue Dionisio Sennes Meza, quien dijo en el juicio que la mujer le pidió que “la protegiera” porque su ex pareja “la quería matar”, pero esta parte sustancial del testimonio no fue tomado en cuenta por los jueces del Tribunal Oral 3.
“Estamos esperando que le den la libertad de una buena vez porque ya lleva cuatro años presa sin pruebas y es injusto que se haga un nuevo juicio”, aseguró Marilyn Aleman, una de las hijas de Marcela Mendoza.