El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, anunció ayer su candidatura para las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Lo hizo a través de un video de Youtube en el que subrayó su intención de poner por delante a la gente trabajadora. Hace un mes, De Blasio se había pronunciado en contra de que se le otorgara un premio al presidente brasileño, Jair Bolsonaro, durante un banquete en el Museo de Historia Natural de Nueva York que se daría en su honor. El alcalde sostuvo entonces que Bolsonaro es “un tipo muy peligroso” por sus posiciones homofóbicas, racistas y de desprecio por la Amazonía.
La consigna de campaña De Blasio es contundente: “Frenar a Donald Trump”. Así comienza su spot que continúa con una crítica hacia las políticas actuales relacionadas al medio ambiente y la inmigración. Además remite a los hitos progresistas de su propia gestión en la Gran Manzana como, por ejemplo, la subida del salario mínimo.
El alcalde de la ciudad más grande del país se une así a una veintena de aspirantes demócratas a la Casa Blanca, entre ellos el exvicepresidente Joe Biden, los senadores Bernie Sanders, Kamala Harris y Elizabeth Warren, el excongresista Beto O’Rourke o el alcalde de South Bend (Indiana), Pete Buttigieg. Tras el anuncio, Trump no tardó en reaccionar y lo calificó como el peor alcalde del país. “Los demócratas están obteniendo otra belleza para unirse a su grupo. Bill de Blasio de Nueva York, considerado el peor alcalde de EE.UU.”, dijo Trump en Twitter.