Convocados por el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, los precandidatos de Alternativa Federal se reunirán el miércoles en Buenos Aires con la agenda ahora marcada por el sorpresivo anuncio de la fórmula Alberto Fernández-Cristina Kirchner. Llegarán al encuentro con dos posturas diferenciadas. Sergio Massa ve el camino allanado para construir un gran frente opositor que derrote a Mauricio Macri, para el que no resigna sus aspiraciones presidenciales. “Se abre un camino de acuerdos”, decía un integrante de su entorno. En cambio, Schiaretti, Roberto Lavagna, Juan Manuel Urtubey y Miguel Angel Pichetto continúan con la idea de una construcción política “antigrieta”, sin el kirchnerismo. “No opinamos sobre las decisiones de otra fuerza política”, respondió ayer el gobernador cordobés sobre el anuncio.
Massa tuvo dos reacciones frente a la noticia de que Alberto Fernández –con quien mantiene un diálogo frecuente– será candidato a presidente. “Tengo respeto por Alberto, la etapa que viene necesitará mucho diálogo y me van a encontrar en ese camino”, dijo primero, al enterarse de la novedad cuando salía al aire por radio Mitre. Massa buscaba promocionar la nueva carta que le había enviado a Macri para pedirle que convoque a la oposición. Pero luego de analizar con su equipo el anuncio, cambió de dirección: “Soy más candidato a presidente que ayer”, salió a decir, para disipar la primera impresión en la que parecía sumarse al armado del kirchnerismo y aliados.
Lo que explicaba un integrante de su equipo de campaña era que la prioridad estaba puesta en generar un armado que derrote a Macri y que ahora veían una gran oportunidad en lo que interpretaban como un paso al costado de Cristina Kirchner. Incluso criticaban que Schiaretti y Lavagna se mantuvieran en la misma cerrada postura como si no hubiera pasado nada. “Hacer anticristinismo ya no tiene sentido”, reflexionaban.
“A Massa se le abre una posibilidad desde muchos puntos de vista. Cristina estaba muy bien en las encuestas, incluso cerca de ganar en primera vuelta. Hay que barajar todo de nuevo. Faltan más de un mes para la inscripción de las candidaturas, si tomáramos una decisión ahora sería suicida. Hay que esperar y ver qué pasa, pero creemos que están dadas las condiciones para un gran frente opositor y vamos a llevar esa postura a la reunión del miércoles”, avisaba un dirigente cercano al ex intendente de Tigre.
Recordaba que Massa y su asesor catalán Antoni Gutiérrez-Rubí –quien en las elecciones pasadas trabajó para Cristina Kirchner– siempre estuvieron entre los que opinaron que la ex presidenta no sería candidata. “Hay cuestiones personales que trascienden a la política. Nadie creía que se podía bajar, incluso en varias reuniones tuvimos discusiones por plantear esa posibilidad”, agregaba el dirigente. Ahora veían debilidades en la postulación de Alberto Fernández, que imaginaban que Massa podía aprovechar. “No hay antecedentes de un vicepresidente más fuerte que su compañero de fórmula. Tenemos muy buen concepto de Alberto, pero hay que ver cómo sigue su candidatura. Insisto en que falta mucho”, deslizaba. Alberto Fernández contó ayer que probablemente hoy se comunicara con Massa. Habrá que esperar para saber el resultado del diálogo.
Menos matices tenía la postura de sus compañeros de Alternativa Federal. “Estamos trabajando en la construcción de una Alternativa Federal y esta construcción va a tener una representación en las próximas elecciones presidenciales”, sostuvo ayer el gobernador Schiaretti, quien luego del impactante triunfo del domingo pasado comenzó a trabajar en la organización del espacio. La primera parada será la cumbre que habrá este miércoles.
“Unos y otros nos han dejado como estamos: mal, muy mal. La única fórmula que necesita la Argentina es dejar atrás el pasado, es devolvernos un presente, es construir futuro y no prometerlo”, fue la reacción de Urtubey.
Schiaretti y Urtubey son los dos gobernadores del peronismo que claramente no apoyan la fórmula Fernández-Fernández ante una amplia mayoría que ayer se mostró a favor. Todo indica que no querrán saber nada con la propuesta de Massa de ir hacia un gran frente de unidad opositora.
Roberto Lavagna y Miguel Angel Pichetto ayer no se pronunciaron, pero desde el domingo pasado que vienen mostrando un discurso en sintonía con el de Schiaretti, acerca de que no tienen que posicionarse en ninguno de los dos lados de la grieta. Cerca de Lavagna respondían que salir a hacer declaraciones sería tomar posición sobre un espacio –el kirchnerismo– que les resulta ajeno. Quien sí habló fue el ex presidente Eduardo Duhalde, quien viene apoyando la postulación del ex ministro de Economía. “Es un error no forzado. Le hace perder un montón de votos”, analizó Duhalde respecto al anuncio.
Curiosamente, Lavagna aún no recibió invitación para participar del encuentro del miércoles. Aparentemente, Schiaretti preferiría hablar a solas con él para convencerlo de la necesidad de aceptar ir a una PASO con los demás precandidatos.