“En 2016 se perdieron 6 mil puestos de trabajo en la industria electrónica y el presente año comenzó con un panorama similar, que nos lleva a comparar la situación con la que atravesamos en los 90”, señaló ayer Oscar Martínez, secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) Río Grande y diputado nacional por el Movimiento Solidario Popular. La reducción del mercado interno junto al incremento en el peso de los productos importados impactó en forma negativa en las empresas radicadas en Tierra del Fuego, que además de despidos y retiros voluntarios acudieron a la no renovación de contratos temporales. La apertura del mercado de las notebooks impacta en 500 puestos directos en la isla.