El gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, junto a la secretaria de Estado de la Energía, Verónica Geese y el presidente del directorio de la EPE, Maximiliano Neri, inauguró ayer la primera "autopista eléctrica" de la Argentina y Latinoamérica que une las ciudades de Rosario y Santa Fe.

Se trata de "un proyecto de vanguardia impulsado por el programa EPE Sustentable, que busca impulsar y ejecutar diferentes acciones en el hacer diario de los empleados de la empresa e inspirar a los usuarios de la red de distribución eléctrica en la aplicación del cuidado, la generación y el uso responsable de la energía eléctrica". La conexión abarca 157 kilómetros de longitud, cuenta con cuatro estaciones de carga para vehículos eléctricos: uno en EPE Rosario, otro en EPE Santa Fe y dos en la autopista.

"Con esta inauguración le damos sentido a la política y al rol del Estado, que no es solamente administrar la coyuntura, sino sobretodo pensar el futuro, sentar ahora las bases para que ese futuro se haga realidad", aseguró Lifschitz.

"Desde hace un año y medio hemos retomado el control público de la autopista, la estamos haciendo de nuevo. Hoy estamos incorporando algo que es del siglo XXI, que son los cargadores para los autos eléctricos, para la movilidad eléctrica que es la que se viene. En Santa Fe tenemos una ley que es pionera a nivel nacional que regula y promueve el desarrollo de la movilidad eléctrica en la provincia. Además, genera una serie de medidas de estímulo, como por ejemplo, la posibilidad de tener energía gratuita durante un año. Todos aquellos que tengan un auto eléctrico, y quieran cargar en estos cargadores, lo van a hacer sin costo. Van a tener que tener una tarjeta especial que los habilite para usar la carga pero esta va a ser sin costo", remarcó el gobernador.

"Esto tiene que ver justamente con incentivar el uso de los autos eléctricos en Rosario, queremos que sea la ciudad pionera en la Argentina en el uso de la movilidad eléctrica, porque además tenemos la ventaja de que esta es una de las grandes ciudades automotrices de América del Sur, con General Motors, una empresa global pero que la sentimos como propia", explicó Lifschitz.