El defensor Lucas Martínez Quarta aseguró ayer que River “puede hacer la diferencia en el estadio Monumental” la semana próxima y así revertir la final de la Recopa Sudamericana, que comenzó adversa por la derrota en el partido de ida jugado en Curitiba, donde perdió ante el Paranaense por 1-0. “Por cómo se dio el partido, el resultado es una ventaja para hacer la diferencia en nuestra cancha. No nos gustó perder, pero sabemos que hay confianza y fe”, expresó el jugador al arribar al país. 

El defensor admitió que River fue superado por Paranaense y por esa razón consideró que la exigua diferencia en contra es hasta ventajosa si se quiere, y también recordó lo sucedido en la Copa de la Superliga contra Atlético Tucumán. River perdió en Tucumán por 3-0 y en el Monumental quedó cerca de lograr el pase a semifinales, ya que se impuso por 4-1 y la victoria hasta pudo ser más holgada, pero no le alcanzó y quedó eliminado por el valor doble del gol anotado como visitante por los norteños.

“La semana pasada casi lo logramos. Nos tocaron el orgullo y vamos a salir adelante”, analizó el Chino en diálogo con los medios de prensa apostados en el aeropuerto.

El marcador central también analizó al Paranaense, que lo dominó durante gran parte del partido y no anotó más goles por la enorme actuación del arquero Franco Armani. “No hicimos un buen partido, hay que tener autocrítica. Cedimos la iniciativa en el juego, que es lo que nos caracteriza, pero estoy seguro que será diferente en nuestra cancha, pero no hay que quitarle mérito al rival, que hizo su partido”, analizó Martínez Quarta, y agregó: “Sabemos que debemos corregir muchas cosas y vamos a trabajar sobre esos errores, pero demostramos varias veces que jugar con nuestra gente y en el Monumental nos favorece, por eso no nos preocupa tanto el 1-0 en contra”. 

El equipo millonario arribó al Aeropuerto de Ezeiza alrededor de las 12 y se trasladó al Monumental. El entrenador Marcelo Gallardo les otorgó la jornada libre a los jugadores y desde hoy comenzará a preparar el partido revancha ante los brasileños, que será el jueves 30 de mayo en Núñez.

Gallardo estará pendiente hasta el fin de semana de la evolución del lateral Gonzalo Montiel, debido que ante la expulsión que sufrió en Brasil Milton Casco se hace imprescindible para la formación del equipo luego de las actuaciones flojas de Camilo Mayada.

Montiel padece una distensión del cuádriceps izquierdo que fue más grave de lo previsto en primera instancia y lleva entrenando diferenciado desde el 8 de mayo pasado habiendo quedando afuera de los últimos tres partidos del equipo.

Con este panorama el plantel millonario volverá a entrenarse en el predio de Ezeiza y están evaluando concentrar desde el lunes que viene en el hotel Sofitel de Cardales donde suelen ir en la previa de los partidos importantes.