Los datos turísticos de marzo y del primer trimestre del año permiten concluir que la temporada veraniega resultó negativa para el sector. Según el Indec, en marzo las pernoctaciones de viajeros residentes en el país bajaron 7,5 por ciento en la comparación interanual. Ese consumo en establecimientos hoteleros fue realizado por 1.394.060 personas, lo cual implica una reducción del 5,8 por ciento interanual. Las zonas de mayor actividad turística de residentes se verificó en la región Buenos Aires, Córdoba y Patagonia. El movimiento opuesto se observa entre los no residentes, atraídos por la fuerte devaluación del peso. La cantidad de viajeros subió en marzo un 16,1 por ciento y las pernoctaciones tuvieron una mejora del 12,8. Sin embargo, en el balance total la cantidad de viajeros (residentes y no residentes) registró en marzo una baja del 1,2 por ciento en relación al año pasado. Lo mismo ocurrió en el primer trimestre, con una caída global entre turistas nacionales y extranjeros del 1,2 por ciento. Pero quienes resultaron afectados por la devaluación fueron los turistas nacionales.