La dura e inesperada derrota de Independiente en Colombia ante el humilde Rionegro Aguilas por la Copa Sudamericana volvió a poner todo patas para arriba en el conjunto de Avellaneda, que ayer vivió un clima bastante caliente antes de iniciar el entrenamiento en Villa Dominico. Es que el DT Ariel Holan recibió críticas de sus propios jugadores, no sólo por ciertos planteos futbolísticos sino por las “formas” con las que se dirigiría al grupo. Y el entrenador, a su turno, se enojó porque los cuestionamientos del plantel tomaron estado público. “Nosotros no pedimos la cabeza del técnico”, se desmarcó al respecto el mediocampista Pablo Pérez.
El bajo rendimiento de Independiente en la caída 3-2 a manos de Rionegro Aguilas de Colombia agudizó un frente de tormenta que involucra a jugadores y cuerpo técnico. Tal es así que después de ese partido por la segunda fase de la Sudamericana, parte del plantel le manifestó al secretario general, Héctor “Yoyo” Maldonado, que no estaban cómodos con algunas cuestiones del entrenador. Así, el directivo se reunió también con el representante del técnico, Fernando Hidalgo, donde se hizo referencia al supuesto desgaste en la relación entre los jugadores y Holan, con contrato hasta el 31 de diciembre de 2021. Y el presidente Hugo Moyano llamó a Holan para apoyarlo y aseguró que lo bancará pase lo que pase en la Sudamericana.
Lo cierto fue que, en Colombia, cinco jugadores con ascendencia en el plantel, entre ellos el arquero Martín Campaña, el defensor Guillermo Burdisso y los volantes Juan Sánchez Miño y Nicolás Domingo, llevaron sus quejas ante Yoyo Maldonado, disconformes por las “formas” de conducir del profesor, a quien los jugadores le pidieron “cambiar el esquema”.
“Son reuniones habituales para encontrar soluciones en la convivencia, en el equipo y en lo institucional. No fuimos a pedir la cabeza del técnico. No tenemos problemas con él, eso lo quiero resaltar. Sé que no jugamos bien y a través de eso aparecen muchas cosas. Me molesta salir a aclarar todo lo que escucho. Hay cosas extrafutbolísticas que ensucian al fútbol y hay que convivir con eso. Sí hay malos resultados y rendimientos bajos”, aseguró Pérez, quien abundó: “No tuvimos solamente dos reuniones, fueron seis o siete con Ariel. Siempre puntualizando errores e intentando mejorar, planteamos problemas y soluciones. Nosotros somos cuarenta y obviamente no nos llevamos bien entre todos, algunos tienen más afinidad con otros”.
Y con vistas a la revancha del martes próximo con Rionegro Aguilas en el estadio Libertadores de América, que el Rojo está obligado a ganar por más de un gol para poder avanzar en la Copa Sudamericana 2019, el ex Boca remarcó: “Estamos bien preparados y con bronca, no confiados. Ojalá que la bronca se convierta en positiva, que podamos hacer un buen partido y pasar de fase”. En caso de que Independiente no pase la serie ante los cafeteros, en Avellaneda no garantizan que Holan continúe.