La Justicia procesó con prisión preventiva a Juan José Navarro Cádiz y a Juan José Fernández, alias “El Cebolla” y “El Gitano”, quienes estuvieron en el auto del que salieron los disparos que terminaron con la vida del diputado de Cambiemos Héctor Olivares y del funcionario Miguel Yadón el pasado 9 de mayo en Plaza Congreso. En tanto, los otros cinco detenidos serán liberados por falta de mérito luego de que el análisis de las cámaras de seguridad y otros elementos probatorios arrojaran como resultado que no participaron del hecho. Se trata de Estefanía Fernández Cano –hija del “Gitano”–, Miguel Navarro Fernández –padre del “Cebolla”–, Luis Cano, Rafael de la Santísima Trinidad Cano Carmona y Castro Iglezias Montoya.

En su fallo, el titular del juzgado criminal y correccional 16 de la Capital Federal, Mariano Iturralde, consideró que Navarro Cádiz y Fernández son “coautores criminalmente responsables del delito de doble homicidio agravado por haber sido cometido con alevosía y por placer, como así también por el uso de arma de fuego con el delito de portación de arma de guerra sin la debida autorización legal”. Ambos habían sido detenidos el pasado 10 de mayo.

“Los imputados fueron quienes se encontraban dentro del vehículo VW Vento –propiedad de Juan Jesús Fernández– desde el cual partieron los disparos que alcanzaron a las víctimas, mientras realizaban una caminata por la plaza del Congreso el pasado 9 de mayo del año en curso, así como también que el arma homicida se corresponde con la pistola calibre 40 secuestrada en el domicilio atribuido a Juan José Navarro Cádiz”, señala el informe, en referencia a los resultados de las investigaciones. Además, en relación a lo que podría haber motivado el crimen, explica que “de la prueba relevada no ha surgido hasta el momento contacto o conflicto previo entre las partes que pudiera haber dado lugar al referido ataque, sin perjuicio de continuarse con la investigación”.