El Ministerio Público de la Acusación (MPA) informó que ayer en Junín y Perú, un móvil de la Policía de Comunitaria detectó que tres personas que acompañaban el cortejo fúnebre de Kevin Aguirre, asesinado el jueves en barrio Ludueña, iban en moto disparando al aire con armas calibre 22. Pidió apoyo a la Policía de Acción Táctica y luego se inició una persecución que terminó con dos personas detenidas, aunque luego recuperaron la libertad, mientras Michael Pereyra, primo de Kevin y único testigo del crimen fue derivado al Heca, donde se encuentra internado por una fractura expuesta en uno de sus pies. Será imputado por tenencia de arma. Los allegados a la víctima denunciaron un operativo "desmedido" de la Policía.
Tiros en el cortejo
Este artículo fue publicado originalmente el día 12 de febrero de 2017