El legislador porteño Sergio Abrevaya (GEN) presentó un proyecto de ley que establece que “bares, restaurantes, establecimientos de comida rápida, cervecerías, pubs y/o similares” deben permitir que las personas que no hayan realizado una consumición puedan utilizar los baños, aunque se les permitiría que cobren “por el uso de las instalaciones”.
Abrevaya explicó a PáginaI12 que el proyecto busca ampliar la cantidad de baños disponibles para los porteños, ante la falta de instalaciones provistas por el Estado en espacios públicos. “Cuando vas a un lugar que no tiene baño te dicen que vayas a un bar, que muchos son emprendimientos familiares y que en este momento de crisis económica están intentando sobrevivir”, afirmó y agregó que, frente a los altos costos que deben afrontar, los dueños de los establecimientos deciden restringir el acceso a los baños y que permitir cobrar el uso sería una solución.
En Buenos Aires hay alrededor de 10 mil bares y, según una ordenanza pública sancionada en 1993 (la 46798), en todos se debe permitir que las personas utilicen los baños del establecimiento, hayan realizado una consumición o no. Sin embargo, esta ordenanza no se cumple y los bares exhiben carteles que afirman que “el baño es de uso exclusivo para clientes”. “Muchos no te dan la llave, le ponen código de acceso o los tienen en muy mal estado y sucios”, destacó el legislador del GEN, quien estimó que esta situación perjudica más a las mujeres.
El proyecto presentado por Abrevaya habilitaría a que los bares cobren media unidad fija (cerca de diez pesos) por persona, aunque “el monto puede discutirse”, aclaró el legislador. A cambio, el establecimiento deberá tener el baño limpio y en condiciones de uso y brindar “jabón, papel higiénico, secamanos y/o similar”.
La iniciativa también prevé eximir del pago a jubilados y pensionados, menores de 16 años, embarazadas, desempleados, discapacitados y personas que consideren que no pueden pagar el monto para el uso del baño. “Como siempre, va a haber algo de buena voluntad de cumplirlo, pero eso es así en todas las leyes –opinó Abrevaya–. Hoy no te dejan entrar de ninguna manera, aunque no puede hacer esto ni hoy ni mañana, y es el Estado el que lo tiene que garantizar”.
En el caso de que exista un establecimiento que no cumpla con lo establecido, el proyecto prevé una multa de 70 unidades fijas (1250 pesos, aproximadamente). Se habilitaría un 0800 y una dirección de correo electrónico para que los usuarios puedan denunciar aquellas situaciones en las que no se cumpla la norma. Esto difiere de la ordenanza de 1993, que no incluye la posibilidad de sancionar a los establecimientos gastronómicos. “Tratemos de que este control exista a manos de los que podemos denunciar”, afirmó Abrevaya.
El legislador porteño recordó que el año pasado se aprobó en la ciudad un proyecto presentado por María Rosa Muiños (Bloque Peronista), por lo que actualmente una ley obliga al Gobierno de la Ciudad a poner baños públicos en parques. Sin embargo, la norma todavía no se cumple. “Yo presenté otros para poner baños en ferias y en bancos, aunque acá se negaron por cuestiones de seguridad – agregó Abrevaya–. Es el Estado el que debe garantizar los baños públicos, ponerlos en lugares masivos y resolver el problema”.
Informe: Ludmila Ferrer.