Axel Kicillof es la garantía que tiene CFK para asegurar la aplicación de un modelo económico opuesto al que lleva adelante Cambiemos, con prioridad sobre el mercado interno, un sesgo industrial y apoyo a las pequeñas y medianas empresas. Esa característica, sus buenos números en las encuestas y la campaña tipo “paso a paso” en plazas, delegaciones vecinales, rurales y empresarias llevaron a que fuera presentado por Unidad Ciudadana como candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires en las próximas elecciones. Competirá, seguramente, contra María Eugenia Vidal, la dirigente que mejor mide del espacio político de Cambiemos. Las encuestas emiten un voto de confianza a Kicillof para el segundo cargo ejecutivo más importante del país que no cuenta con ballottage en caso de una elección reñida. Kicillof es porteño –como la propia Vidal, Scioli y otros gobernadores bonaerenses–, en estos meses recorrió mucho la provincia y despertó pasión como ningún otro dirigente con excepción de CFK.
Los buenos números de Kicillof en los sondeos permiten que la construcción que hizo “paso a paso” surta el mejor efecto. El ex ministro viene pateando la provincia en el Renault Clio de Carlos Bianco, ex secretario de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería. En su reducido equipo de campaña también participan Javier Rodríguez, ex secretario de Agricultura, y Ariel Aguilar, empresario pyme, para las relaciones con entidades rurales y empresarias, y Cuto Moreno y María Teresa García, enfocados en estrechar los lazos con el peronismo local.
Axel Kicillof tiene 47 años y es doctor en Economía por la Universidad de Buenos Aires, en donde comenzó su militancia estudiantil en la agrupación TNT (Tontos pero no Tanto) junto a Augusto Costa, Emmanuel Alvarez Agis, Carlos Bianco, Nicolás Arceo, Mariana González, Cecilia Nahón y Javier Rodríguez, entre otros. A través de su vínculo inicial con Mariano Recalde, Axel formó parte del nacimiento y expansión de La Cámpora y en 2011 fue designado subgerente de Aerolíneas Argentinas y director en Siderar por parte del Estado. En noviembre de 2013, fue designado ministro de Economía, desde donde lideró la nacionalización de YPF y fue autor de planes como el Procrear, Precios Cuidados, Ahora 12 y el Progresar. Su equipo económico estuvo conformado por aquellos compañeros de la UBA. También impulsó el acuerdo de deuda con el Club de París y llevó adelante el duro litigio con los fondos buitre en los tribunales de Nueva York.
En las elecciones de 2015, Kicillof obtuvo una banca como diputado nacional por la ciudad de Buenos Aires. El economista vive hace tiempo en el barrio de Agronomía aunque tiene un domicilio en Pilar. De Kicillof por ahora se conocen muchas más definiciones en materia económica que en otros temas sensibles para la provincia como la inseguridad o el narcotráfico. “Hay un equipo de asesores en temas de salud, educación, seguridad, obras y caminos y desarrollo ferroviario”, indican cerca de Axel.
Kicillof llenó plazas y mantuvo reuniones en Chascomús, Lezama, Dolores, Pilar, Ranchos, Henderson, Bolívar, Roque Pérez, Daireaux, Tres Lomas, Hipólito Yrigoyen, San Andrés de Giles, Pergamino, Carmen de Areco, Colón, Carlos Tejedor, General Villegas, Los Toldos, Maipú, Las Flores, Rauch, General Lamadrid, Laprida, Coronel Pringles, 25 de Mayo, Tapalqué, Saladillo, General Alvear, Ramallo, Arrecifes, Salto, 9 de Julio, Bragado, Chivilcoy, Balcarce y la Costa Atlántica. El año pasado visitó Florencio Varela, Quilmes, Almirante Brown, Escobar, Malvinas Argentinas, Merlo y Vicente López. Si bien no compartió actividades propias con Magario, existe una relación desde el tratamiento de las leyes de emergencia tarifaria y emergencia pyme.