“Queremos y necesitamos conocer la verdad y estamos dispuestos a ir a fondo para que ello suceda”, expresaron las autoridades del Hospital Garrahan en una conferencia de prensa que ofrecieron este mediodía para aclarar su participación en la investigación que se lleva adelante sobre Ricardo Russo, el pediatra acusado por tenencia y distribución de pornografía infantil. “El hospital no fue notificado” previamente sobre lo ocurrido “ni tampoco las autoridades sabían que se llevaba adelante una investigación”, aclaró Carlos Kambourian, presidente del Consejo de Administración del Hospital Garrahan, a cargo de la lectura del comunicado en el que las autoridades expresaron “el absoluto repudio ante cualquier hecho que vulnere derechos de niños, niñas y adolescentes”.
“Nos parece de suma importancia volver a aclarar que el hospital tomó conocimiento de la causa recién en el momento (martes a las 16) que se produjo la detención” de Russo, expresó Kambourian frente a los medios que se reunieron este lunes en la puerta del hospital. Ese mismo día, según aclaró, las autoridades tomaron la decisión de “apartar de las funciones al imputado” y de iniciarle un “sumario administrativo”, al tiempo que se enfocaron en “garantizar el normal funcionamiento” del servicio de Inmunología y Reumatología en el que Russo desempeñaba sus funciones.
“Desde el primer momento las autoridades del hospital se pusieron a entera disposición de la justicia para colaborar en todo lo que fuera necesario”, aclaró el presidente del Consejo, quien confirmó la intención de las autoridades para que el Garrahan sea particular querellante en la causa en la que se investiga a Russo.
Según informó Kambourian, luego de apartar al pediatra de su cargo se llevaron a cabo mecanismos de seguridad para “salvaguardar las áreas sensibles” que puedan servir a la investigación. Después del allanamiento que el 31 de mayo se realizó en la oficina en la que trabajaba Russo, de la requisa de su vehículo, “que se encontraba dentro de las instalaciones” del hospital, y de la “inspección ocular en los consultorios de Inmunología y Reumatología”, las autoridades del hospital se reunieron con los fiscales, quienes les informaron que “si bien existen fotografías tomadas en 2015 dentro del hospital”, aún se está “investigando si son de uso médico o no”.
“Queremos y necesitamos conocer la verdad y estamos dispuestos a ir a fondo para que ello suceda”, continuó Kambourian, quien expresó el dolor de la comunidad y el compromiso “intacto para atender las necesidades de las familias y los pacientes que todos los días confían en nuestros profesionales”.
Para cerrar, el presidente del Consejo agradeció el apoyo de las familias, de los centros de salud que enviaron su solidaridad desde distintos puntos del país y de los medios de comunicación que siguen el caso. “Les pedimos respeto, seriedad y responsabilidad” por los pacientes y sus familiares, y por “todos los que trabajamos todos los días con dedicación”, concluyó Kambourian.
“La gente del Hospital Garrahan está muy sorprendida por este caso y se ha puesto desde el primer momento a disposición de todo lo que haga falta en la investigación. Seguimos trabajando para ir al juicio oral tan pronto como sea posible”, había dicho la fiscal especializada en delitos informáticos Daniela Dupuy, luego del allanamiento que este viernes realizó en las instalaciones del hospital el personal de la Dirección de Delitos Tecnológicos de la Policía de la Ciudad.
“Lo que en principio secuestramos entre la cantidad de imágenes y videos de pornografía infantil son algunas fotos que Russo tomó” a dos niñas, el 24 de noviembre de 2015, “en las que se las ve totalmente desnudas. Y desde la fiscalía lo que debemos corroborar es si eran para fines médicos como dice él y su defensa o si eran producidas como parte de una red de pornografía infantil”, informó entonces Dupuy. “Las fotografías muestran a las nenas desnudas y hacen zoom en determinados lugares de su anatomía, y fueron tomadas puertas adentro de su consultorio en el hospital, en el que este sujeto pasaba muchas horas de lunes a viernes por lo que era casi de su uso exclusivo”, detalló.
Dupuy también informó que entre febrero y agosto de 2018 Russo "facilitó" para su descarga "270 videos con contenido pornográfico", y que en noviembre de 2018 "distribuyó siete archivos de video mediante la plataforma E-mule".
Ricardo Russo, pediatra que trabaja en el Garrahan desde 1993, fue detenido el martes 28 de mayo, acusado de tenencia, distribución y producción de pornografía infantil en niños de seis meses a 14 años. El jueves por la noche, la jueza en lo Penal, Contravencional y de Faltas N° 24 de la Ciudad de Buenos Aires, María Laura Martínez Vega, le dictó la prisión preventiva después de un pedido realizado por la fiscal Dupuy, quien entregó “todas las pruebas y fundamentos sobre el riesgo y peligro de fuga o entorpecimiento del acusado para asegurar su comparecencia en el juicio oral y público”. Este domingo, Russo fue trasladado al penal de Ezeiza, donde no podrá tener contacto con celulares y computadoras.