El cuadro de situación del mercado de la yerba mate empezó a ser evaluado en la primera reunión para la fijación del precio que regirá en la cosecha de marzo a septiembre de este año, donde también se reeditaron las quejas por el incumplimiento de los valores vigentes y el pago con plazos excesivos.
Como se si tratara de un regreso al sistema vigente en el Siglo XIX en algunas estancias del pampeanas, en la misma convocatoria -impulsada por el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM)- trascendió además el malestar de los cosechadores o "tareferos" por el pago con bonos o vales de sus haberes, condicionados a compras en determinados comercios.
En ese contexto, tanto los industriales como los molineros, productores, cooperativistas y trabajadores rurales, comenzaron las conversaciones para actualizar el precio de la materia que se ubica en 5,10 pesos para el kilo de hoja verde y 19,20 pesos para la "canchada" o semielaborada.
Las partes no dieron a conocer sus pretensiones, pero las cooperativas se expresaron por "el mantenimiento" de los valores mencionados, ante la falta de cumplimiento que se verifica en el lapso que comenzó en octubre del año pasado y se extenderá hasta el 31 de marzo.
El planteo fue rechazado por los productores que reclamarán un monto cercano a los 50 centavos de dólar o bien 6,20 pesos para el kilo de hoja verde, mientras que los demás sectores se excusaron ante la falta de información con respecto a la evolución del precio del producto en las góndolas.
Las reuniones continuarán en los próximos días, aunque si no hay acuerdo en el INYM será la Secretaría de Agricultura de la Nación la encargada de definir los nuevos valores, a partir de los estudios de costos que presenten los diferentes sectores.
El jueves próximo en Posadas se realizará un encuentro entre productores y trabajadores rurales de las distintas regiones con el propósito de reclamar el cumplimiento de los precios vigentes; limitación de las plantaciones y la bancarización de la actividad.
En tanto, los cosechadores de la zona norte prevén reclamos para evitar el pago de sus haberes con bonos o vales, cuya proliferación habría desatado una fuerte controversia por la asimilación de éstos al peso, aunque su uso está condicionado a determinados comercios.
El economista local Raúl Karaben advirtió en el diario Primera Edición que "2016 no fue nada fácil y se cerró con pérdidas en todos los mercados y caídas fuertes en Chile y Siria", en el primer caso por la incursión de Brasil en el mercado yerbatero que también se hizo sentir en las ventas a Uruguay.
En el plano interno, el analista señaló que ante un nuevo ciclo de sobreproducción, el panorama "no es muy alentador" porque "lamentablemente el precio se hundió, hay un achatamiento muy grande de precios".