El juez Claudio Bonadio sumó un nuevo procesamiento con prisión preventiva y embargo contra Cristina Kirchner, en el marco de la causa de las fotocopias de los cuadernos. Además, inició el trámite para la elevación a juicio de una parte del expediente.
El fallo firmado este jueves corresponde a los tramos que investigan la cartelización de la obra pública y la renegociación de contratos de corredores viales por parte del Occovi. Además de la ex presidenta, fueron procesados más de cien ex funcionarios y empresarios.
En total ya son once los procesamientos dictados por Bonadio contra Cristina Kirchner, la mayoría de ellos con pedido de prisión preventiva. Ocho corresponden a los diferentes desprendimientos de los cuadernos. Los tres restantes son por dólar futuro, Los Sauces –ya elevada a juicio oral– y la causa por el Memorándum de Entendimiento con Irán.
“Todas estas causas se formaron con el propósito exclusivo de intensificar de manera jamás vista en un estado de derecho la persecución sobre un grupo de personas”, expresó a PáginaI12 el abogado de CFK, Carlos Beraldi.
Según puede leerse en el fallo, el procesamiento a la ex mandataria es por los delitos de “cohecho pasivo, reiterado en mil veintisiete (1.027) hechos, setecientos uno (701) de ellos en calidad de coautora, y trescientos veintiséis (326) en calidad de partícipe necesaria”. También por dádivas en dos hechos, en calidad de coautora. Bonadio además, le trabó un nuevo embargo, esta vez por 11.502 millones de pesos. Según afirmó Beraldi, la decisión de Bonadio se da “sin que se indique un solo elemento de prueba real que vincule a Cristina Fernández con los supuestos delitos”.
Entre el centenar de imputados, Bonadio amplió además los procesamientos con prisión preventiva de Julio De Vido, los empresarios Lázaro Báez, Cristóbal López, Gerardo Ferreyra y Fabián de Sousa. Todos ya están presos por esta y otras causas que cursan en Comodoro Py. En tanto, Aldo Roggio, Carlos Wagner, Hugo y Eduardo Eurnekian, Osvaldo Acosta, Juan Chediak, Javier Sánchez Caballero y Juan Carlos de Goycoechea, Angel Calcaterra, entre otros hombres de negocios, fueron procesados pero seguirán en libertad.
En cambio, Gianfranco Macri, hermano del Presidente, fue beneficiado con la falta de mérito.
En la resolución de 678 páginas, Bonadio se basa en las declaraciones de arrepentidos y testigos que dicen haber cobrado o pagado coimas. José López, Claudio Uberti, Carlos Wagner –quien reveló en la causa el mecanismo de cartelización de la obra pública–, Ernesto Clarens, Leonardo Fariña, son algunos de los testimonios e indagatorias que el magistrado cita en su fallo. Ninguno de ellos dijo ni acreditó que Cristina Kirchner haya recibido alguno de los pagos. Todos coinciden en que existió el mecanismo de cartelización, algo en lo que incluso coincide CFK en su libro Sinceramente.
El punto es que algunas de estas declaraciones podrían haberse logrado bajo coacción, según investiga Alejo Ramos Padilla en la causa por la red espionaje ilegal. Y entre los argumentos, Bonadio citó, además, un escrito presentado en el expediente por Elisa Carrió –también imputada en Dolores- en el que la Diputada de Cambiemos describe cómo habría sido el mecanismo recaudatorio.
En cuanto a la pesquisa sobre las presuntas coimas pagadas por las empresas concesionarias de los peajes, el juez se basó en los dichos de Caludio Uberti, ex titular Órgano de Control de las Concesiones Viales (Occovi), quien declaró como arrepentido que era el encargado de recolectar el dinero. Justamente, el ex espía Rolando Barreiro contó en Dolores que el fiscal de los cuadernos Carlos Stornelli lo coaccionó para que cuente que traían plata en aviones desde Venezuela. Según Barreiro, Uberti dejó constancia de la extorsión en una escribanía.
Por otra parte, Bonadio le comunicó a Stornelli y a las querellas a cargo de la UIF y la Oficina Anticorrupción, que ya se puede requerir la elevación a juicio oral de un tramo importante de la causa de las fotocopias.