Donald Trump defendió el aumento de las redadas para detener a migrantes sin documentos, recordó que fueron parte de sus promesas de campaña y argumentó que la mayoría de los que serán deportados son miembros de bandas y traficantes de droga. Según señaló Stephen Miller, principal asesor político de la Casa Blanca, la administración Trump baraja alternativas para restablecer el veto migratorio a los ciudadanos de siete países de mayoría musulmana, bloqueado en los tribunales. “Estamos considerando y buscando todas las opciones, entre ellas la apelación ante el Tribunal Supremo”, explicó Miller en una entrevista con la cadena de televisión Fox News.

Trump firmó el 25 de enero dos decretos migratorios que además de exigir la construcción de un muro con México, pedían el aumento de fuerzas de seguridad para acelerar redadas en busca de migrantes indocumentados, poniendo el acento en personas con antecedentes criminales, pero también en faltas menores sin sentencia. La decisión endurece las deportaciones con respecto al anterior gobierno de Barack Obama, que priorizaba a migrantes sin papeles y con condenas criminales o delitos graves. En tanto que Miller, uno de los arquitectos del veto migratorio, explicó que el gobierno republicano está considerando la posibilidad de que Trump firme “una nueva orden ejecutiva diseñada para evitar infiltraciones terroristas en nuestro país”. El asesor considera que el presidente tiene autoridad para establecer un veto migratorio y controlar quién entra al país. Trump le devolvió la gentileza en Twitter: “Felicidades Stephen Miller por representarme en varios programas matinales dominicales. Gran trabajo”, escribió en la red del pajarito.