Poco a poco la Casa de Gobierno tucumana comenzó a poblarse de militantes y funcionarios del gobierno de Juan Manzur que sin un dato oficial expresaban una contenida satisfacción por un resultado favorable. Mientras tanto, en las escalinatas se levantó un escenario por donde pasan grupos musicales locales. Los primeros datos oficiales aparecieron poco antes de las 21.30. El primer informe de la Junta Electoral Provincial, con apenas el 5.61 por ciento de las mesas escrutadas, Manzur está primero en las preferencias. Estas 204 mesas de las 3635 no representan tendencia pero sirve para calmar los nervios de esta hora. Se prevé que pasadas las 23 recién podrá vislumbrarse una tendencia.
La existencia de los acoples es una de las razones que provocó la demora en la votación de los tucumanos. Largas filas se vieron en las diferentes escuelas fruto de la lentitud que implicaba el ingreso al cuarto oscuro y poder encontrar la boleta elegida. También se produjeron demoras en las aperturas de las mesas pero nada de eso alivia la tensión en los diferentes comandos de campaña que se encuentran en la capital tucumana.
La división del peronismo no favorece al oficialismo de Tucumán pero, todo indica, que no lo perjudica. La participación de Ricardo Bussi en la pelea por la gobernación se convirtió en un polo de atracción de los que están desencantados con Cambiemos. Son tan antiperonistas que prefieren votar al hijo del genocida y eso termina perjudicando a Silvia Elías de Pérez.
