Desde Roma

Los italianos ¿creen cada vez menos en la democracia, en el ejercicio de sus deberes ciudadanos, desilusionados por la difícil situación económica que se arrastra desde hace años o por el avance de partidos con los que no se identifican? Esta es la pregunta que surge luego de conocer el número de votantes en la segunda vuelta de las elecciones municipales que se hicieron este domingo en 136 municipios de todo el país y cuya primera vuelta fue el 26 de mayo, en coincidencia con las elecciones europeas. Los votantes esta vez disminuyeron un 16% respecto de la primera vuelta, alcanzando el 52,1% en comparación con el 68,21% del 26 de mayo. En las precedentes municipales de 2014, el número de votantes había alcanzado el 71% de los que tenían derecho al voto, según datos del Ministerio del Interior.

Frente a esta noticia un poco preocupante, otra presenta un panorama relativamente mejor. Los dos principales partidos protagonistas del futuro italiano serán el centroizquierda y el centroderecha, quedando el Movimiento Cinco Estrellas (M5S) del viceprimer ministro Luigi di Maio, casi totalmente rezagado. El centroizquierda liderado por el Partido Democrático (PD), en efecto, pese a que perdió en numerosos municipios, sigue teniendo la mayoría entre los 221 municipios (con más de 15.000 habitantes) que fueron a elecciones. Es decir el PD conquistó 112 de ellos contra los 85 que logró ganar el centro derecha liderado por Forza Italia de Silvio Berlusconi y principalmente La Liga del otro viceprimer ministro, Matteo Salvini.  El M5S, curiosamente sólo conquistó un municipio. Entre los municipios ganados por el PD se cuentan Florencia, Bari, Livorno, Rovigo, Prato, Reggio Emilia, Cesena y Cremona, entre otras. 

 Salvini destacó en sus comentarios post elecciones, sobre todo la conquista de Ferrara y de Forlí, dos ciudades de Emilia Romaña, una región con gran influencia del desaparecido Partido Comunista Italiano. “Extraordinarias victorias de la Liga en la segunda vuelta. Hemos elegido alcaldes donde gobernaba la izquierda desde hace 70 años”, comentó orgulloso el también  ministro del Interior aludiendo a Ferrara y Forlí.

 El M5S conquistó sólo la municipalidad de Campobasso, en la región de Molise (centro del país). Según los datos oficiales, el M5S perdió numerosos municipios que había conquistado en 2014, y muchos de ellos fueron a parar a manos de Salvini, como Civitavecchia, el puerto de Roma. A las desgracias del M5S se agrega además la noticia difundida por varios periódicos en la que se asegura que otra parte de votantes del M5S, eligió esta vez votar al centroizquierda, lo que habla de la debilidad creciente del M5S desde que llegó hace un año al gobierno.

También el centroizquierda se mostró contento ya que vio que podía recuperar parte de la confianza perdida en estos últimos años, por ejemplo en Livorno, un puerto de la región Toscana, que había perdido en 2014 al ser desplazado por el M5S. “Bellas victorias y bellas confirmaciones. Gracias a todos y a todas. Gracias a quien ha combatido. La alternativa a Salvini existe y es un nuevo centroizquierda”, comentó el secretario del PD, Nicola Zingaretti en Twitter, haciendo alusión a la campaña para crear este nuevo centroizquierda que él viene impulsando desde hace meses. “En esta votación, es inútil negarlo, se ven heridas ante las cuales es necesario reflexionar y entender cómo reaccionar”, agrego Zingaretti en Facebook. El PD sufrió en estos últimos años numerosas divisiones, especialmente desde que Matteo Renzi estuvo al frente del partido y del gobierno italiano. Viejos militantes se apartaron y fundaron otras organizaciones que Zingaretti querría reunificar. Según el secretario del PD –que fue presidente de la región Lacio a la que pertenece Roma y eso le valió una gran popularidad además de ser el hermano de un famoso actor italiano, Luca Zingaretti, protagonista de la serie El Comisario Montalbano– su partido propone un plan que incluye la “revolución verde”, menos impuestos sobre el trabajo, estímulos para las empresas, simplificación administrativa, entre otras cosas. Y en torno a este programa quiere construir “una nueva alianza”. “Cambiemos al PD para ir al encuentro de la ganas de participar y de combatir que están reemergiendo en el país. Con el voto de ayer se ha dado otro paso. El camino será largo y difícil pero estamos caminando”, concluyó.  

Pese a los triunfos de la Liga y las derrotas del M5S, el gobierno nacional dificilmente cambiará su rumbo por ahora. Aunque se podrá tener una idea más precisa en los próximos días, luego de las reuniones ministeriales previstas y donde se discutirá nuevamente sobre temas muy serios, como la deuda del estado. Se habla de 2,3 billones de euros en 2018. Pero el problema mayor es la relación con el Producto Interno Bruto (PIB) que en 2018 fue del 132,2%, en 2019 debería subir a 133,7% y en 2020 al 135,2%. Por esta razón, entre otras, el gobierno recibe presiones de la UE para que modifique el programa económico elaborado que intenta medidas que pueden aumentar todavía más la deuda pública, como el corte de ciertas tasas del estado o el no aumento del IVA. Para solucionar en parte el problema algunos exponentes de la Liga propusieron emitir “mini Bot” es decir, Bonos del Tesoro en pequeña escala y que como moneda, podrían usarse para pagar deudas del estado, sin emitir más euros. Pero esto ha sido duramente criticado porque una moneda al margen del euro es ilegal en los países que forman parte de la Unión Europea y adhirieron a su acuerdo sobre la moneda única.