Desde Santa Fe

Una primera condena a cinco años de cárcel por 39 delitos, entre ellos secuestros, vejaciones, robos calificados y amenazas, es la prueba de que el Comando Radioeléctrico de la Costa operaba como una patota. El condenado es un suboficial de 29 años, Juan Emilio Torres, a quien el juez de Santa Fe, José Luis García Torres, le impuso una pena de cinco años de prisión en un juicio abreviado en el que se declaró culpable, pero la causa es más amplia porque investiga a otros nueve integrantes del grupo.

La pesquisa está a cargo del fiscal de la Unidad de Delitos Complejos Ezequiel Hernández que reveló el "accionar delictivo" de Torres y de los otros nueve imputados, aunque lo llamativo es que sólo tres están presos, uno en domiciliaria, otro con medidas alternativas y cuatro en libertad.

Los hechos ocurrieron entre octubre y noviembre de 2017. Torres fue condenado "como coautor de 36 delitos y autor de otros tres", mientras cumplía funciones en el Comando Radioeléctrico de la Costa. "En algunas oportunidades, su accionar fue resultado de la previa distribución y asignación de tareas que hizo junto a los otros policías que delinquieron y a quienes seguimos investigando", explicó el fiscal.

"La pena fue impuesta por la coautoría de vejaciones, apremios ilegales, severidades, amenazas coactivas, allanamiento ilegal, robo calificado, falsedad ideológica en instrumento público y privación ilegítima de la libertad. Además, se lo condenó por la autoría de los delitos de comisión por omisión de tortura de funcionario competente ajeno al delito y omisión de denuncia calificada por ser funcionario público en ejercicio de sus funciones", agregó Hernández.