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"BASTA DE CONVENTILLO"
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Susana Decibe está peleada con Roque Fernández porque el ministro de Economía disiente con su proyecto de imponer un impuesto del uno por ciento a los automotores para destinar ese dinero a los salarios docentes. Decibe sostiene que Roque no asume el problema educativo como un tema del gobierno nacional, ya que no se mueve un ápice de la teoría según la cual la educación es un problema provincial. Antonio Erman González está enojado con Roque Fernández porque el titular del Palacio de Hacienda cuestiona su proyecto de reforma laboral porque, en realidad, se trata de un retroceso parcial respecto de todo lo que el Gobierno, presionado por el poder económico, hizo en el área desde 1989. Decibe y González están convencidos de que gozan del respaldo presidencial porque el Presidente quiere volver a ser popular y cerrar filas con la CGT para ser reelecto. Roque está atormentado porque piensa que esa necesidad de Menem conspira contra las buenas relaciones del Gobierno con el poder económico. Generalmente, las ambiciones electorales del PJ han chocado contra las imposiciones del plan económico. La pelea actual del gabinete es una repetición de eso, sólo que en este caso adelantada un año por la ansiedad de la re-reelección. "Mientras nosotros hacíamos una gira feliz y el gobierno de Nueva Zelanda tuvo el gesto de trasladarse en pleno a Auckland, acá en Buenos Aires había una guerra civil", dijo Menem ofuscado. "Negro, no puede ser que lo que hablamos ayer en Aeroparque esté hoy en los diarios y que incluso lo que vos me dijiste esté puesto en boca mía", le dijo a Erman. Como siempre, el tono de cada declaración varía según sea transmitida por voceros de cada ministerio. De todos modos, decibeles más, decibeles menos, hubo una crítica para cada uno de los díscolos. "No encuentro sentido a las declaraciones del ministro de Economía cuando cuestiona la reforma laboral o al plan Laura. Para colmo, yo hablé con él para que se tranquilice y al otro día Carlos Rodríguez dice que el desempleo no bajará del diez por ciento y que se perderán miles de empleos. No puede ser que Carlos Rodríguez salga a decir que se va a recalentar la economía. ¿Cómo puede ser que Rodríguez salga a decir que se va a recalentar la economía, cómo puede ser que hable en contra de nuestra política?", dijo Menem contra el equipo que ocupa el Palacio de Hacienda. "No puede ser que se efectúen declaraciones cuando hay un problema por el impuesto para los docentes. Si hay un desacuerdo, las cosas no hay que decírselas al periodismo sino tratarlas en el gabinete con el Presidente", agregó, en referencia a Roque y a Decibe. La discusión en el gabinete no trata sólo sobre el espacio de poder de cada ministro sino también sobre la escala de valores que guiará lo que queda de la gestión de Menem. Hasta ahora, el Gobierno no tenía dudas de la necesidad de que la estrategia económica consistía en atender a todas las presiones de los empresarios, entre ellas la anulación de los derechos laborales de sus trabajadores. Y que el equilibrio de las finanzas públicas o la estructura impositiva regresiva era mucho más importante que el dinero destinado a la educación pública. La re-reelección ha generado señales contrarias a una historia que hasta ahora sólo registra algunos corcoveos. Decibe lo explicó esta semana cuando dijo por radio: "Se trata de una discusión ideológica sobre a dónde se destina la riqueza obtenida en estos años de esfuerzo." Es difícil que su jefe piense que se trate de algo más que de la estrategia re-reeleccionista. DESMENTIDA DE BALZA
"El gobierno norteamericano no ha pedido ni tiene en sus planes solicitar a la Argentina una colaboración de esa naturaleza", aseguró un vocero de la embajada en Buenos Aires a la agencia DyN. Fuentes del Ejército explicaron a Página/12 que un eventual envío de fuerzas al extranjero debe ser tramitado por el Ministerio de Defensa y luego aprobado por el Congreso. Según la versión, el jefe del Comando Sur norteamericano, general Charles Wilhelm, realizó un sondeo entre los militares argentinos cuando visitó Buenos aires, el 17 del mes pasado. La versión afirmó que las conversaciones están muy avanzadas. "En ningún momento se trató un tema de esta naturaleza o vinculado con el narcotráfico", afirmó Balza, que hace dos meses visitó a Wilhelm en la sede del Comando Sur, en Miami. El jefe del Ejército prefirió no emitir una desmentida oficial, y calificó las versiones como "inexistentes". LA MINISTRA CUESTIONO AL FONDO MONETARIO SUSANA CONTRA RESTO DEL MUNDO Por Nora Veiras Un día después de la masiva movilización docente, la ministra de Educación, Susana Decibe, tuvo una satisfacción en la reunión de gabinete: su par de Economía, Roque Fernández, optó por callarse la boca y el proyecto de aplicar un impuesto del 1 por ciento sobre los autos, aeronaves y embarcaciones para recaudar alrededor de 750 millones de pesos será elevado al Parlamento. En su defensa del camino para conseguir fondos destinados a aumentar los salarios docentes, Decibe cuestionó no sólo a los legisladores sino también a los gobernadores y a la titular de la misión del Fondo Monetario Internacional, quien había calificado su propuesta como "populista de carácter político". La ministra contraatacó con que "Teresa (Ter Minassian) conocerá las cosas de su país; las de mi país las conozco yo". "El presidente Menem nos respalda a tal punto que quiere que hasta el Tango pague el impuesto", aseguró anoche a Página/12 un alto funcionario del Palacio Sarmiento, obviando que el Estado no paga impuestos sobre sus bienes. Más allá de la ocurrencia presidencial, los datos que maneja Educación para fundamentar su proyecto son los siguientes: * Hay 8 millones de vehículos registrados de los cuales 5,5 millones están circulando. Según el Registro de la Propiedad Automotor, el valor promedio de las unidades es de 14 mil pesos. Aplicando una tasa del 1 por ciento se podrían recaudar unos 770 millones de pesos. Las motos estarán exentas y no se aplicará un mínimo de 50 pesos. * El valor total de las embarcaciones existentes asciende a 2030 millones de pesos. El impuesto general será de 50 pesos y un 1 por ciento. Por esta vía se recaudarían 20 millones de pesos. * El parque de aeronaves civiles asciende a 943 millones de pesos. Los propietarios tendrán que pagar 200 pesos como base y un 1 por ciento. En Educación calculan que, reduciendo unos 40 millones de pesos que serían imputables a bienes personales, se podrían conseguir unos 750 millones de pesos. El titular de la Comisión de Presupuesto de Diputados, Oscar Lamberto, consideró "infantil" la idea del equipo de Decibe y evaluó que la masa a recaudar no excedería los 240 millones de pesos. El gabinete educativo contrapone como argumento que "la diferencia es que ahora, con el reempadronamiento automotor, se puede seguir de cerca el cobro del impuesto" y aseguran que "vamos a poner plata para que la DGI pueda disponer de la información del Registro Automotor que depende de la órbita de Justicia". La discusión seguirá después de Semana Santa, cuando se vuelva a reunir en Diputados la subcomisión de funcionarios, legisladores y gremios que, después de un año de ayuno docente, está tratando de consensuar un proyecto de financiamiento educativo. DIFERENCIAS El reclamo docente se instaló en la interna Menem-Duhalde. El gobernador bonaerense dijo ayer que "los docentes están en pleno derecho" de realizar protestas porque "en democracia se actúa así". Su virtual ministra de Educación, Graciela Giannettasio, acompañó la postura de Ctera de no cambiar fondos por "precarización" de las relaciones laborales docentes. Duhalde reivindicó el Fondo de Financiamiento aprobado por unanimidad en su provincia y recordó que "el tema salarial es de las provincias". Desde la Nación, Decibe dijo que ella se ocupa porque los gobernadores no quieren hacerlo.
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Por segunda vez
en una semana, uno de los máximos dirigentes del Gobierno utilizó la palabra
"conventillo" para referirse a las disputas de poder dentro del oficialismo.
"Yo quiero seguir con este gabinete. No me obliguen a echarlos. Estoy cansado de que
esto se convierta en un conventillo cada vez que me voy", dijo el presidente Carlos
Menem a sus ministros ayer en la quinta de Olivos. Dos de los aludidos --Susana Decibe y
Roque Fernández-- silbaron bajito. El otro, Antonio Erman González, quiso explicar algo,
pero Menem lo cortó y le dijo, de mala manera, que le tocaría el uso de la palabra
cuando él terminara de hablar. Erman, después, resignó ese derecho. Hace exactamente
una semana, Eduardo Duhalde también dijo que estaba "harto" de este
"conventillo". Duhalde se refería explícitamente a la discusión abierta por
la re-reelección. Menem no, pero también las discusiones de gabinete reflejan heridas
abiertas por el mismo tema.