GUERRA DECLARADA EN LA CITY
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Por Alfredo Zaiat Los veintiocho bancos más grandes del sistema recibirán hoy un oficio judicial del juez Omar Ferro que ordena el embargo preventivo de parte de los fondos que tienen depositados en el Banco Central. El monto que el magistrado dispuso inmovilizar alcanza a la friolera de 72 millones de pesos. Esa medida forma parte de la guerra declarada entre la Bancaria y los dueños de las entidades financieras por la contribución adicional del dos por ciento sobre los intereses y comisiones que perciben. La mitad de ese aporte era para la obra social de los bancarios. Los banqueros consultados anoche por este diario primero se sorprendieron de esa disposición judicial, y luego aseguraron que darán pelea. La Bancaria, conducida por Juan José Zanola, accionó contra las principales entidades, que son las que más aportan. Entre las que sufrirán el embargo de sus cuentas se encuentran el Nación, Ciudad de Buenos Aires, Río, Galicia, Francés, Boston, Quilmes, Bansud y Nazionale del Lavoro. El Nación lidera el ranking con una deuda acumulada de tres trimestres de 24 millones de pesos, seguido por el Río, con 6,5 millones. La Bancaria estima que debe recibir de todos los bancos unos 24 millones cada tres meses. El conflicto comenzó cuando los bancos, con el fuerte respaldo del entonces ministro de Economía Domingo Cavallo, lograron que el Ejecutivo derogara por decreto la contribución adicional --establecida por la Ley 19.332-- al desaparecido Instituto de Servicios Sociales Bancarios (ISSB). Posteriormente, tres sentencias en el fuero federal, dos de Cámara y, finalmente, la Corte Suprema declararon esa norma "nula e inconstitucional". El decreto había suprimido el aporte a partir de julio del año pasado. Desde entonces se fue acumulando una deuda, que a fines de marzo totalizaba 72 millones de pesos. La Bancaria basa ese reclamo en las inspecciones y fiscalizaciones que realizaron en las entidades con el fin de obtener el pago de las contribuciones. Los bancos habían diseñado una estrategia para eludir los sucesivos fallos en contra de la Justicia, logrando que el Ejecutivo dictara un decreto que desconocía a la Bancaria como obra social continuadora del ISSB. Zanola devolvió el golpe recurriendo, una vez más, a la vía de la Justicia, obteniendo una medida precautoria que ordenaba al Ministerio de Economía abstenerse de ejecutar lo decidido por ese decreto, específicamente en cuanto hace a la supresión de las contribuciones al ISSB. Los banqueros, enterados por este diario del embargo que le dispondrá el juez Ferro, señalaron que el efecto de esa medida será un encarecimiento de los servicios bancarios y una suba de la tasa de interés para los préstamos. Zanola sostiene que el aporte del uno por ciento influye marginalmente en los costos (0,2 por ciento en una tasa del 17 por ciento), y que el embargo es consecuencia por no haber acatado los bancos "la sentencia de la Corte y, por lo tanto, ahora comenzarán a pagar los costos de una decisión equivocada".
CARLOS RODRIGUEZ DIO UN ROSADO INFORME AL GABINETE TODO VA MEJOR EN EL FRENTE EXTERNO Ayer le tocó al viceministro de Economía, Carlos Rodríguez, infundir optimismo a sus pares del Gabinete nacional. Durante el encuentro semanal realizado en Olivos, el colaborador de Roque Fernández aseguró que la Argentina sigue funcionando con un "alto nivel de solidez y crecimiento y sin problemas en el frente cambiario y de precios". Para rematarla, aseguró que en lo que va del segundo trimestre del año el temido déficit comercial se redujo a sólo la mitad de lo estimado. Durante su informe, Rodríguez destacó que la economía continúa creciendo a una tasa de entre el 6,8 y el 7 por ciento anual ritmo que, estima, se va a mantener durante todo el año. En cuanto al déficit comercial, aseguró que en los próximos meses se mantendrá entre los 150 y los 200 millones mensuales, lejos de los 400 que indicaban hasta ahora los propios cálculos oficiales. La drástica reducción del déficit que el Gobierno segura haber registrado a partir de abril se ubica a sideral distancia de la mayor parte de los pronósticos privados, que llegaron a augurar una brecha de 8000 millones para este año. Dicho resultado amenazaba descolocar a la Argentina frente a las metas pautadas con el Fondo Monetario Internacional. A su vez, el informe del viceministro de Economía salió al cruce de las preocupaciones que pudiera haber generado la sensación de rebrote de la crisis asiática y su eventual repercusión en América Latina. La presentación de Rodríguez ante el Gabinete nacional fue en respuesta a un pedido del presidente Carlos Menem, quien había exigido a Fernández un detalle de la situación global de la economía y particular de la evolución del mercado de trabajo y la creación de nuevos puestos. A su turno, Erman González aplaudió la flamante aprobación de la reforma laboral que hizo el Senado, omitiendo cualquier referencia a los previsibles escollos que deberá enfrentar ahora el proyecto en Diputados. El ministro de Trabajo también dio cuenta de los "esfuerzos" de su cartera para organizar seminarios que difundan las bondades de la flexibilización, no sólo en Argentina sino también en el exterior.
LA CRISIS TODAVÍA AMENAZA CONTAGIAR "Los efectos de la crisis asiática en la economía real de los países de la región y en Estados Unidos se están empezando a sentir ahora", afirmó el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Alan Greenspan. El funcionario participó ayer junto al secretario del Tesoro, Robert Rubin, de una reunión en el Congreso para presionar en busca de la luz verde a un aporte de 18 mil millones dólares al Fondo Monetario. "Todavía hay una oportunidad no despreciable de que la crisis del sudeste asiático tenga efectos negativos inesperados más amplios en Japón, América Latina y Europa central y del Este, y de que esto, a su vez, repercuta en Estados Unidos", advirtió Greenspan. El FMI necesita la inyección de recursos provenientes del Gobierno norteamericano para recuperar parte de los 100 mil millones de dólares en préstamos que otorgó la institución a fines del '97 a Indonesia, Tailandia y Corea del Sur, y contar así con fondos suficientes en el caso de que se desate una temida segunda ola de la crisis. La totalidad de esos fondos quedó absorbida sin lograr la superación definitiva del cuadro de preocupación. "Aunque en meses recientes la tendencia a la estabilización es alentadora en el sudeste asiático, está muy claro que esas economías aún no están a salvo, como confirman los acontecimientos recientes", dijo Greenspan, en referencia a la abrupta caída de las bolsas alrededor del mundo el lunes pasado. Luego alertó sobre el problema que acarrearán los tan conocidos efectos contagio en los mercados emergentes. Y en este sentido hizo un llamado a los legisladores para que apuren la aprobación del paquete de recursos que solicita el Fondo Monetario. "Con suerte, no será necesario usar ese dinero y no habrá que retirar los fondos, pero debemos ser precavidos", afirmó. |