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TEMA LIBRE El conflicto India-Pakistán
Pakistán anunció una moratoria unilateral de pruebas nucleares. India respondió diciendo que también podría hacerlo pero lo condicionó a sentarse a charlar sobre varios puntos. Pakistán y los países del club nuclear quieren encontrarle ya una solución al problema de la región de Kashmir, pero India se niega a la mediación internacional sobre el asunto.
The Washington Post Con Pakistán enfrentando la bancarrota por las sanciones internacionales impuestas por su programa de armas nucleares, y también por el crecimiento considerable de gasto en la nueva carrera armamentista con India, los líderes llamaron a sus compatriotas a que hagan su deber patriótico y que "coman pasto" para que el dinero esté disponible para la seguridad nacional. Pero en un país repleto de corrupción, donde los políticos tradicionalmente llenan sus propios bolsillos en lugar de fomentar programas para los pobres y analfabetos, los paquistaníes dicen que deberían probar un poco de pasto ellos mismos. Bajo la fachada nuclear, Pakistán está ahogado por el principesco estilo de vida de sus oficiales y sus políticos.
The Economist El hecho de que las sanciones económicas podrían endurecerse no tranquilizó a nadie. Respecto del tratado de prohibición de pruebas nucleares, si India y Pakistán piensan que les sirve a su seguridad, lo firmarán; si no lo consideran así, no lo firmarán, Pero sus firmas no remedian el daño al régimen mundial de antiproliferación. Una prohibición de tests puede prevenir los ensayos de los diseños de nuevas y armas, pero no les impiden a los países la construcción de más armas con los diseños que ya tienen. Este es un precio que difícilmente valga la pena pagar, y ciertamente no a través de concesiones que pongan al Tratado de No Proliferación Nuclear en un riesgo mayor al que ya está corriendo.
Edinburgh Daily Standard Desde el momento en que el insoportable festival patriotero del Sr. Atal Behari Vajpayee empezó alarmantemente a cobrar la forma de una especie de gobierno, era claro que India iba a testear, Pakistán iba a contratestear y el subcontinente indio estaba deslizándose por una colina hacia una crisis de consecuencias exactamente impredecibles. La cuestión no es ahora si el Sr. Vajpayee y su contraparte en Islamabad pueden ser persuadidos de volver el reloj atrás --lo que en cualquier caso sería imposible para ambos, aun si quisieran-- sino si Occidente va a tener el coraje necesario para fijar límites a estas dos nuevas potencias nucleares de facto. (De una columna de opinión de William Boot.)
Nigeria quiere democracia
La muerte del dictador Sani Abacha puede abrir el camino de la democracia en la riquísima Nigeria, el quinto productor de petróleo de la OPEP, el país más superpoblado de Africa y el más corrupto del mundo. Con la clase media más sólida en el Africa subsahariana, con muy importantes recursos humanos, el compromiso democrático nigeriano cambiaría los ejes políticos del continente.
Le Monde En el terreno económico, el régimen militar de Nigeria no significó un avance, y el crecimiento anual de un 3 por ciento fue inferior al de sus vecinos. En el frente interno, la situación sigue muy tensa. Numerosos opositores al régimen instaurado por Abacha, entre los que se cuenta el millonario Moshood Abiola, vencedor presunto de la elección presidencial anulada en 1993, están desde entonces en prisión sin haber sido nunca sometidos a juicio. Las tensiones intercomunitarias son violentas en el sur. Como el poder está en manos de hombres del norte, éstos están encantados de que en el sur luchen entre ellos, y apoyan a unas facciones contra las otras.
The Washington Post La muerte el lunes pasado del general Sani Abacha abrió una lucha de poder en la nación más poblada de Africa que podría iniciar el retorno del régimen civil. El dictador Abacha se había apoderado del poder en 1993, y su última gran aparición pública fue en marzo para agasajar la visita del papa Juan Pablo II. Los mecanismos del poder son oscuros en la nación africana, y los militares más encumbrados tomarán decisiones ad hoc. Los partidarios de las distintas facciones, abundantes pero difícilmente cuantificables. Son ellas las que definirán en suma si los militares se quedarán en el poder, o si los civiles tendrán una oportunidad.
The New York Times Pocos africanos estarán de duelo por la muerte del general Abacha, un líder profundamente antipopular. Pero, mientras que Nigeria espera signos más claros de su futuro político, el estado general es de temor. El legado de Abacha es un Ejército desmoralizado, una clase política cuyos líderes han sido encarcelados o forzados a exilarse, y una economía nacional saqueada. Las trampas que Abacha dejó en el camino podrían llevar a la violencia en el país más populoso de Africa, y estremecer a las restantes naciones africanas occidentales que gravitan como pequeñas lunas alrededor de este monstruo regional.
Guerra mundial en los Balcanes
Los detalles de la represión por mano de los serbios de los albaneses étnicos en Kosovo incluyen más de 300 muertos, miles de heridos, al menos 50.000 refugiados. Pero no es el aspecto humanitario el que distingue a Kosovo (hay suficientes conflictos atroces de Eritrea a Sri Lanka), sino la escalada internacional que parece indetenible.
The New York Times La polvorienta ciudad albanesa de Tropoje es la última parada para muchos de los mercenarios, contrabandistas y voluntarios idealistas que se encaminan a pie a la provincia yugoslava de Kosovo para unirse al separatista Ejército de Liberación de Kosovo. La región fronteriza de Albania está inundada con voluntarios y traficantes de armas, muchos de los cuales venden algunas de las 650.000 armas saqueadas de los cuarteles albaneses el año pasado. Si los serbios se deciden a lanzar algunas granadas por encima de la frontera, el primer lugar que van a elegir es Tropoje. Del otro lado del límite, ya hay una base albano-kosovar.
The Washington Post El terror producido por el presidente yugoslavo Milosevic en Kosovo es precisamente el tipo de depuración étnica que la administración del presidente norteamericano Bill Clinton dijo repetidamente que no iba a tolerar. Pero hasta ahora su respuesta fue muy débil. Por cierto, no se debe amenazar irreflexivamente con el uso de la fuerza. Lo que hace diferente al caso de Kosovo es la probabilidad de que la guerra, si estalla, va a destruir la frágil paz de Bosnia y va a arrastrar en su escalada inclusive a Grecia, Bulgaria y Turquía. Si esto ocurriera, Clinton y sus militares no tendrían opción, y su tarea sería más difícil. (Editorial)
International Herald Tribune Una vez más, los refugiados que abandonaban sus hogares descendieron por las cuestas de las montañas en los Balcanes. Con el recuerdo de Bosnia en la mente, los pedidos de intervención a la OTAN fueron estridentes. Pero la comparación con Bosnia es errónea y peligrosa. En Bosnia, los musulmanes se defendían contra la muerte y la expulsión de mano de serbios bien armados. En Kosovo, un autodenominado Ejército de Liberación está combatiendo contra los yugoslavos con la intención de separarse de Serbia. Una incursión de la OTAN sería considerada como un apoyo a ese movimiento separatista: algo muy distinto de la interrupción de un asesinato masivo.
Rusia
Newsweek Hasta ahora, el gobierno de Kiriyenko se las arregló para evitar una devaluación del rublo. El FMI dispara con sus armas retóricas: no hay planes para más fondos. Pero lo único que consiguió esto es confundir a los mercados (...) Y los comerciantes piensan que la sutileza fue demasiado lejos. Ellos quieren ver el dinero, y quieren verlo ahora (...) Las devaluaciones de la moneda y el colapso económico en Asia oriental, efectivamente, hicieron caer a tres gobiernos. En dos casos --Tailandia y Corea del Sur-- surgieron mejores gobiernos a la zaga de los disturbios, y el caso de Indonesia podría ser otro más. ¿Alguien está seguro de que lo mismo podría pasar en Rusia?
Segunda vuelta en Colombia
The Economist Pastrana puede aún esperar el triunfo con razonable grado de confianza. En las dos rondas de 1994, estuvo cerca de Samper. Hoy se espera que el estado de la nación y la falta de popularidad de Samper le den la delantera en la segunda vuelta --pese a todo el éxito inesperado de Serpa en la primera vuelta--. Y esta vez, esperemos, no va a haber dinero de la droga para reforzar la campaña liberal. Mucho depende de los 2,8 millones de votantes que apoyaron a Noemí Sanin (...). Ciertamente ella logró expresar el estado de ánimo del electorado, motivando a los colombianos a expresar su descontento en las urnas. Lo que por cierto es un logro bastante inusual. |