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Forcejeos, bastonazos, chicos arrastrados por el piso, varias Madres de Plaza de Mayo golpeadas, doce detenidos y varios heridos fue el saldo de la represión que coronó el "escrache" a Fernando Enrique Peyón, capitán de fragata de infantería de marina (RE), que formó parte del grupo de tareas de la Escuela de Mecánica de la Armada durante la dictadura y actualmente es parte del Servicio de Informaciones Navales y miembro de la agencia de seguridad Breedes, fundada por Alfredo Yabrán. Antes de finalizar la concentración y como en otros "escraches", los HIJOS tiraron pintura contra el edificio donde vive Peyón tiñendo a varios policías de rojo y los más de cien miembros de la Federal que custodiaban el lugar, junto con la Guardia de Infantería, comenzaron a detener violentamente a los manifestantes. Además de los miembros de HIJOS, las Madres de Plaza de Mayo, otros organismos de derechos humanos y varios partidos de izquierda, este "escrache" convocó a una gran cantidad de vecinos del barrio de Villa Urquiza, que se acercaron especialmente para participar de la convocatoria que, desde el inicio, estuvo fuertemente custodiada. Más de cien efectivos de la Policía Federal cuidaban el frente del edificio. A la vuelta, sobre la calle Nahuel Huapi, tres carros blindados de la Guardia de Infantería esperaron desde las 19.30 y un helicóptero monitoreaba el "escrache" desde el aire. Ayer, Peyón había mandado a repartir por la zona una carta a los vecinos en donde avisaba que se iba a producir un "escrache" frente a su domicilio y les recomendaba que tengan "tranquilidad de que nuestra comisaría estará presente y con los medios necesarios para protegerlo". Si bien otros represores ya habían intentado responder frente al "escrache", en general lo hacían para desligar su participación del terrorismo de Estado. Peyón, por el contrario, lo reivindicó: "yo en lo personal tuve el privilegio, el alto honor y la gran responsabilidad de defender a la PATRIA de los embates del terrorismo, pero también debo decirle que pertenecí a una elite que tuvo una honrosa y destacadísima actuación en esa GUERRA, la cual, tal vez, fue el factótum de la derrota de las Organizaciones Terroristas que a su vez, dentro de su orgánica de superficie tuvieron muchas Organizaciones que hoy nos persiguen (Madres de Plaza de Mayo, Abuelas, Organizaciones de Derechos Humanos y otras)", dice textualmente la nota que se repartió por el barrio. "Si lo que querían era que la gente no viniera, pienso que fue contraproducente, yo vine de bronca porque me repartieron ese volante", afirmó Fabio, comerciante del barrio. Otros vecinos aseguraban que en la zona viven muchos militares retirados y en actividad, inclusive, miembros de HIJOS informaron que el martes se enteraron de que en el mismo edificio donde vive Peyón, también habita el capitán de fragata Juan Carlos Rolón, quien también participó del grupo de tareas de la ESMA. Antes de la represión los HIJOS habían hecho una representación teatral que incluyó a un chico disfrazado de albañil orinando en un inodoro que previamente había sellado al piso; otro vestido de militar que blandía dos banderas al grito de "patria", "orden" y otras consignas caras a los militares; y la simulación de una sesión de tortura. Los miembros de HIJOS responsabilizaron por los incidentes a policías de civil que se habrían mezclado entre quienes protestaban e informaron que fueron detenidos varios de los dirigentes de esa agrupación.
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