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Un juez de Faltas fue intimado por el Gobierno porteño a demoler la construcción que acaba de finalizar en el balcón de su nuevo departamento de Barrio Norte, luego de que un inspector municipal constató que se trata de una obra ilegal. El magistrado Miguel Angel Camio, titular del Juzgado de Faltas Nº 13, recibió la notificación el 29 de junio pero todavía no acató la orden de la Dirección de Obras Particulares. En el caso tomó intervención el juez civil Luis Miguel Preindlsperg, quien también ordenó la suspensión de los trabajos bajo apercibimiento de pasar los antecedentes a la Justicia penal por "desobediencia". En el mismo edificio tiene un piso el viceministro del Interior, Jorge Matzkin. "La ciudad está llena de casos de obras ilegales pero este caso excede lo común porque se trata de un juez de faltas que está transgrediendo normas que él mismo tiene que juzgar. No se puede hacer una obra sin obtener los permisos correspondientes en la Municipalidad", señaló a Página/12 el profesor de Derechos Reales de la UBA, Saúl José Arbit. Camio adquirió algunos meses atrás el noveno y último piso del edificio ubicado en Tagle 2554, entre las avenidas Del Libertador y Las Heras. Antes de mudarse resolvió realizarle varias reformas, entre ellas, el cerramiento del balcón del frente. Al darse cuenta de las intenciones del magistrado, la vecina del octavo piso, Ada Noemí Derechinsky, puso el grito en el cielo: "El cerramiento afecta la visual desde mi balcón", dijo a este diario la vecina. El balcón del noveno comienza a partir de la línea de edificación del piso de Derechinsky. De forma tal que el balcón de la mujer está completamente descubierto, sin techar, y desde el mismo no se alcanza a ver las paredes del departamento superior. "La amplia visual que tenía desde el balcón fue la razón más importante para comprar este piso y no voy a permitir que me la quiten", aseguró Derechinsky. En asamblea, los copropietarios rechazaron el proyecto del nuevo vecino. "En un principio nos dijo que desistía pero finalmente realizó el cerramiento de la mitad del balcón", agregó la vecina. No es el primer escándalo en el que se ve envuelto este juez de faltas. Según fuentes judiciales, fue sometido a juicio político por la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal acusado de incompatibilidad de funciones. Al parecer, cuando asumió al frente del tribunal, durante el Gobierno del presidente Raúl Alfonsín, Camio era abogado del Banco Ciudad y mantuvo ese cargo. Las mismas fuentes indicaron que el magistrado "terminó absuelto gracias a un recoveco legal, aun cuando se había comprobado que tenía los dos puestos". Con el patrocinio de Arbit, Derechinsky presentó un interdicto (pedido de paralización) de obra en el juzgado civil Nº 99, alegando que Camio violó la Ley de Propiedad Horizontal (Nº 13.512) y del Reglamento de Copropiedad. Este último --señala el escrito-- "contiene la prohibición de realizar toda clase de obras y/o construcciones que puedan molestar a los propietarios o perjudiquen la estética del edificio". El 10 de junio Derechinsky denunció a Camio en la Dirección de Obras Particulares de la ciudad de Buenos Aires. "Con el cerramiento sumó metros cuadrados a su propiedad sin autorización municipal", indicó la mujer, quien vive en el edificio desde hace 25 años. "Además --continuó-- la obra rompe absolutamente la unidad estética y arquitectónica del frente del edificio. Le da un aspecto precario a un edificio de categoría porque utilizó chapa y blindex". Consultado por este diario, Camio argumentó que es legal el cerramiento en cuestión. "Según los planos, estoy utilizando mi superficie semicubierta. Así que no tengo que esperar la autorización del consorcio", opinó el magistrado. El 27 de junio, el juez en lo civil Preindlsperg ordenó la "paralización" de la obra e intimó a Camio a abstenerse de continuarla "bajo apercibimiento de pasar los antecedentes a la Justicia Penal", según consta en la cédula de notificación. Dos días después, tras visitar el edificio, un inspector de la Dirección de Obras Particulares intimó al juez a "retrotraer la unidad funcional a su estado original".
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