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El jefe de la Oficina de Legislación de la actual Defensoría, Sergio Delgado, se negó a firmarla, aduciendo que renunciar a ejercer "el derecho humano a ser elegido" sería como comprometerse "a permanecer privado de mi libertad". Además se opuso a la constitución del Consejo de Organizaciones Sociales reclamado por la Multisectorial como organismo de participación popular, porque equivaldría a "delegar las atribuciones que la ley le encomienda al Defensor". También objetó la constitución de un voluntariado ciudadano integrado por vecinos, que según la propuesta debía "multiplicar por miles los ojos, oídos, brazos, inteligencia y voluntad del Defensor, descentralizando la recepción de denuncias y resolviendo in situ, mediante procedimientos de mediación, muchos conflictos". Esa práctica le produciría la misma "repugnancia" que el trabajo gratuito de los meritorios en la Justicia, explicó. Por último, Delgado dijo que sí se comprometía a no utilizar su función "para exhibir públicas diferencias con la administración que puedan en el futuro traducirse en las temidas consecuencias electorales que se han querido evitar". Estas palabras cobran especial actualidad, porque Delgado es el nombre por el que se inclina ahora el Frepaso, en su empecinamiento por obstruir la candidatura del economista Claudio Lozano, sostenida con idéntica determinación por un arco muy amplio de organizaciones sociales, que incluye desde las Madres de Plaza de Mayo a la Central de los Trabajadores Argentinos, Poder Ciudadano, Greenpeace, la FUBA y Espacio de Mujer, por nombrar a unas pocas que ayudan a entender su pluralismo. Lo intentó antes con el constitucionalista Rafael Bielsa, quien en lugar de confrontar con la Multisectorial expresó con mayor elocuencia que sus propios miembros la "legitimación democrática" del agrupamiento, cuya finalidad consiste "en ofrecer múltiples puentes para que las demandas sociales sean canalizadas con la oportunidad que da registrarlas cada mañana allí donde se producen", escribió. Bielsa apoyó también la propuesta de la Multisectorial de crear un ámbito de discusión y consenso entre la Legislatura y las organizaciones sociales y se negó a la utilización de su nombre para dividirlas y enfrentarlas con el sistema político. Hasta ahora, Chacho Alvarez sólo hizo saber a través de filtraciones periodísticas su veto a la candidatura propuesta por la Multisectorial, lo que ha generado tensiones dentro del propio Frepaso. Ante su falta de precisiones sólo era posible suponer que obedecía a conflictos personales con Lozano, quien en el pasado fue su compañero de militancia en una agrupación en la que también estaba el tan homenajeado pero poco imitado Germán Abdala. El apoyo que ahora trasciende a la candidatura de Delgado obliga a pensar en otras razones. Su rechazo a la propuesta de la Multisectorial, a la que su carta en forma velada atribuye ser una plataforma de lanzamiento política opositora, sugiere que el rechazo del Frepaso no se limita a un candidato, sino a todo el arco social expresado en la Multisectorial y a su concepción de la Defensoría como un canal para la participación popular. Al mismo tiempo, el Frepaso se ha comprometido a votar como miembro del Superior Tribunal de Justicia de la Ciudad a un ex miembro del estudio jurídico del jefe de gobierno Fernando De la Rúa, el cordobés Julio Maier. Durante el anterior gobierno radical, Maier ganó respeto como coautor de un proyecto progresista de reforma del Código Procesal Penal de la Nación, pero su práctica profesional como abogado lo llevó luego a defender a Amira Yoma por el lavado de narcodólares y al prófugo Aldo Dadone en la causa IBM-Banco Nación. Un veto y un voto para pensar. |
Luego del fracaso de la candidatura de Norberto La Porta,
los miembros de la Multisectorial de Organizaciones Sociales firmaron un Acta de
Compromiso. Declararon que no pertenecían a la conducción de ningún partido ni estaban
vinculados con empresas contratistas del Estado y se comprometían a no concurrir a
funciones directivas ni electivas en los dos años posteriores a su mandato. Luego
propusieron la firma del Acta a todos los candidatos a la Defensoría del Pueblo de la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires.