Algo huele mal en La Matanza
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Por Javier Lorca y Cecilia Sosa Una universidad nacional funciona en un predio de propiedad privada que, además de alumnos y profesores, suele albergar ferias internacionales de maquinarias y otras actividades comerciales. Y el actual rector de esa casa de estudios, de dudosos antecedentes académicos, es el director general de Contaduría del Congreso de la Nación: Daniel Martínez. La trama de poder tejida en torno de la universidad en cuestión, que ya logró eludir un pedido de informes en Diputados, se ilumina con dos nombres propios: las claves del acertijo son La Matanza y Alberto Pierri, presidente de la Cámara baja y titular de la fundación propietaria de las 28 hectáreas donde está establecida la universidad. Los diputados Mary Sánchez y Juan Pablo Cafiero (ambos del Frepaso) presentaron un nuevo proyecto de resolución para que el Ministerio de Educación informe a los legisladores sobre una larga lista de presuntas irregularidades perpetradas en la Universidad de La Matanza (UNLM) y detectadas por un equipo de investigadores de la propia institución. Entre muchos otros interrogantes, los denunciantes plantean si son o no compatibles las dos funciones públicas ejercidas por el rector; si éste posee los antecedentes necesarios para ocupar su puesto, por qué la mayoría de los cargos docentes no ha sido concursada y, en cambio, fue designada directamente por el Rectorado; por qué los profesores son contratados por períodos de sólo cuatro a seis meses; cómo se obtuvo el predio de la casa de estudios; y por qué la UNLM paga salarios a alumnos que participan o participaron activamente del centro de estudiantes (ver aparte). "La UNLM no es un proyecto educativo, es un proyecto personal de Pierri para manejar dinero público. Su táctica es funcionar sin informar. Los actos de gobierno de la universidad no se publicitan y nadie sabe quiénes integran el Consejo Superior, ni cómo se los eligió", aseguró, en diálogo con Página/12, Margarita Ozcoidi, profesora de Antropología en la carrera de Trabajo Social y directora de la investigación en la que se apoya la petición de los diputados Sánchez y Cafiero. "Pierri utiliza la estructura del Congreso para dominar a La Matanza y, en particular, la universidad. Las autoridades de la UNLM son designadas a dedo por él", afirmó Mary Sánchez, prencandidata a la intendencia del partido que habitan 1.200.000 personas. El vicerrector en ejercicio del Rectorado de la UNLM, Daniel Martínez, recibió a este diario y desestimó las denuncias: "Hay una clara intencionalidad política por parte de Mary Sánchez", dijo. Cuando se le recordó que, de acuerdo con la ley de Educación Superior, el cargo de rector requiere una dedicación exclusiva y haber sido profesor por concurso de una universidad nacional, el también funcionario del Congreso explicó que su rol académico es interino. "El rector, Ernesto Cartier, se tomó un año sabático y yo lo sustituyo hasta mayo del '99. Además, tengo antecedentes para ello: fui docente en la Universidad de Lomas de Zamora y soy profesor titular concursado de la Escuela de Negocios de la Universidad Nacional de General San Martín", retrucó. No obstante, el director de esa escuela, Horacio Val, negó esa afirmación: "Si alguien con ese nombre fuera profesor acá, yo lo sabría", aseguró. La UNLM nació en 1989 como un proyecto del propio Pierri y comenzó a funcionar en 1990, con poco más de 300 alumnos y un presupuesto cercano a los cuatro millones de pesos. Hoy, según sus autoridades, tiene 15 mil estudiantes y recibe 22 millones al año. El predio que ocupa perteneció a la empresa automotriz Volkswagen y, al decir de los denunciantes, fue cedido a cambio de la condonación de una deuda fiscal que rondaba los siete millones y medio de pesos. Pero Martínez aseguró que el inmueble pertenece a la Fundación de la UNLM. Si ambas premisas son ciertas, una deuda pública habría terminado en manos privadas. "La fundación le dio a la universidad el 22 por ciento del terreno (ocho hectáreas sobre un total de 28) y el resto quedó para sus propias actividades comerciales: organizan ferias y lo alquilan para reuniones evangelistas, pero no se sabe a dónde va a parar lo recaudado", dijo Ozcoidi. "La cesión del terreno nos solucionó un grave problema de espacio. El único objetivo de la fundación es apoyar a la universidad", se defendió el rector Martínez. Y también justificó la tutoría de Pierri: "El fue el impulsor de la UNLM y es lógico que encabece la fundación", la misma asociación civil sin fines de lucro en la que trabaja, como secretario, el secretario administrativo de la Cámara de Diputados, Enrique Picado. Otro asunto ríspido es el de los docentes. "La situación de los profesores es muy precaria y solamente hay 32 elegidos por concurso", protestó Ozcoidi. De hecho, Martínez admitió que solamente se concursó el 10 por ciento de los casi 400 cargos docentes. "Entonces, la mayoría de los profesores es interina y, por eso, tiene contratos de cuatro o seis meses. No llamamos a más concursos porque no nos alcanzan los fondos para convocar a jurados de prestigio", se quejó. Pero, minutos después, se mostró orgulloso de la capacidad de ahorro de la UNLM: "Nuestra organización interna nos permite ahorrar muchos recursos y tenemos una universidad equipada con modernos laboratorios y equipos informáticos".
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