A Alvaro Alsogaray nunca le cayó simpática la convertibilidad, tal vez porque fija el tipo de cambio, en vez de dejarlo libre, o simplemente porque no es suya sino de Cavallo, personaje a quien le niega prosapia liberal. Ayer, entrevistado por Radio América, el capitán ingeniero admitió que quizá convenga apartarse de la convertibilidad. Pero antes de responder la pregunta, se mostró muy cauteloso. "Si le contesto que sí o que no, puedo estar introduciendo factores de perturbación", explicó. Al fundador de la UCeDé le cuesta despedirse de las ya lejanas épocas en que sus palabras pesaban en por lo menos alguna gente.
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