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Por Cristian Alarcón --¡Este país es divino Carmen! Mirálo a De la Rúa --le dice el funcionario a una mujer, al salir de la Casa Rosada. La foto del Jefe de Gobierno lucía en un cartel sostenido por una travesti, con los labios pintados de rojo. --¡Mirálo a Corach! ¡Esto está lleno de trabas! --contesta ella, que lo ve al ministro del Interior en similares condiciones. Se trataba de la protesta de las organizaciones de gays, lesbianas y travestis contra los intentos de penalizar la prostitución. Una queja que se cruzó con las denuncias de que la Policía Federal no cumple con el Código de Convivencia Urbano. Los abogados de la Asociación de Meretrices Argentinas (AMAR) se reunieron ayer con el fiscal de Cámara de la ciudad, Juan Carlos López y coincidieron, por separado, con el cuadro de situación descripto por las travestis en la marcha: "Los policías que a muchas las conocen, les admiten que como no las pueden llevar por el código, las levantan por averiguación de antecedentes. Están inflando las estadísticas de detenciones con las más vulnerables", le dijo a este diario, la abogada de CTA y AMAR, Diana Gondra. --¿Vos sos de las que pagan 15? --le pregunta María de los Angeles, una travesti con sede en Godoy Cruz a la que tiene enfrente, una salteña que hojea el libro El/Ella, ¿Ella?, Apuntes sobre transexualidad masculina, de la escritora Florencia Abate. --Entre perder la noche y hacer una vaquita, preferimos la vaquita --contesta la leída, explicando la nueva mecánica que delatan. Aún así pinta su mundo un tanto más suave que la persecución y la coima permanente de las épocas en que el karma era el edicto policial. "¿Qué cambió? Cambió que ya no pagamos 50 pesos como era antes. Que no tenemos tanto miedo, pero en realidad estamos yendo presas como siempre." Paula Rodríguez, de OTRA, Organización de Travestis y Transexuales de Argentina, sostiene que en Palermo, aunque no hay desnudos ni grupos de travestis, el DNI, que muchas no tienen, les resulta una condena. "Ellos nos conocen, saben de nuestras caras porque muchas hace tiempo que trabajamos en la zona y vamos a parar al calabozo igual. Hay chicas a las que las han desnudado para mojarlas, como en las viejas épocas", sostiene Rodríguez, sobre Avenida de Mayo 525, la entrada al Gobierno de la Ciudad. La marcha de ayer comenzó en la Plaza, hizo parada frente al polémico vallado de la Rosada, y enfiló luego hacia el edificio porteño de Gobierno, en el otro extremo. OTRA, ALIT y ATA, las tres organizaciones travestis, junto a la Comunidad Homosexual Argentina y la agrupación Amenaza Lésbica entregaron tres cartas, dirigidas al jefe de Gobierno de la ciudad, Fernando de la Rúa; el ministro de Interior Carlos Corach, y al secretario de Seguridad Miguel Angel Toma, por su proyecto de modificación al Código Penal. A todos les advierte que si se penaliza la prostitución o se incorporan figuras ambiguas, como la sanción a los que provoquen "desórdenes o escándalos que afecten la decencia y la tranquilidad pública", se violaría tres tratados y convenios internacionales. "Son figuras abiertas, que por experiencia sabemos que pueden ser usadas para la persecución policial como la que se daba con los edictos", explicó a Página/12 César Cigliutti, titular de la CHA. A la misma hora en que los manifestantes hacían ruido y les respondían a las señoras que, al pasar comentaban "el escándalo", en la sede de la Fiscalía de Cámaras de la ciudad los representantes legales de AMAR denunciaban las irregularidades en la aplicación del código. "Planteamos que ya es común una nueva práctica. Aunque las llaman por el nombre las llevan por averiguación de antecedentes. Si se portan bien les dicen que les va a tocar una vez por semana, si se portan muy bien, una cada dos", asegura la presidenta de AMAR, Elena Reynaga. Desde la superintendencia de Seguridad Metropolitana, el comisario Luis Fernández, niega la mala actuación de sus subordinados. "Eso es mentira. Puede ser que a algunas se las haya detenido para establecer identidad, exactamente igual que si se detiene a las personas comunes --le dijo a este diario--. Además no nos interesa la estadística, eso es para los periodistas. La ilusión mía es tener cero detenidos, cero delitos. Tener presos es un compromiso, hay que cuidarlos, hay que atenderlos, hay que darles de comer y no hay provisión de alimentos para eso." AMAR piensa desmentir la versión de Fernández. Ayer el fiscal López le dijo a Página/12 que recibieron las denuncias verbales y esperan una lista de quienes han regresado, por averiguación de antecedentes, a los calabozos de las comisarías 6ª y 7ª, de Once, y la 16ª y 28ª de Constitución, zonas donde abundan los labios rojos.
A ONCE MESES DE LA TRAGEDIA DE AUSTRAL Los familiares de las víctimas de la tragedia aérea de Austral, ocurrida hace once meses, quieren levantar un monumento en el Aeroparque Metropolitano, en recuerdo de sus parientes muertos, pero la empresa Aeropuertos 2000, concesionaria de la estación aérea, no se lo permitió. "Nos dijeron que el único lugar donde puede ser factible su colocación es en el Museo Aeronáutico, lo que nos pareció una burla", dijo a Página/12 Mirta Badano, la esposa de uno de los pasajeros fallecidos en el accidente. No es el único problema que afrontan las familias de las víctimas: el 10 de octubre, cuando se cumpla el primer aniversario del accidente, prescribirá el reclamo civil por daños y perjuicios, y a menos de un mes de esa fecha, aún no pudieron tener acceso al informe de la Junta de Investigaciones del Uruguay, que analizó las causas de la tragedia. "El pedido lo hicimos hace seis meses. Como la Fuerza Aérea y el Gobierno de la Ciudad nos dieron el visto bueno, encargamos el monumento con el costo del trabajo a cargo de los familiares", explicó Badano. Desde hace casi un año, los familiares no tienen un lugar donde recordar a las víctimas: sus cuerpos desintegrados fueron sepultados en un mismo sitio, en el cementerio de Fray Bentos. El único lugar común que encontraron para rendirles homenajes es el aeroparque porteño, donde los aguardaban aquel trágico 10 de octubre en que el DC-9 de Austral de precipitó a tierra. "Habíamos presentado cinco lugares alternativos, todos en las plazoletas ubicadas en el exterior del edificio, de manera que no resultara molesto para los pasajeros", dijo Badano. Se trata de una escultura de dimensiones discretas: un triángulo de 2,50 metros en su lado mayor y no más de 80 centímetros de altura. Según los familiares, su colocación "no hubiera constituido un obstáculo para nadie". "En la primera entrevista con la gente de Aeropuestos 2000, hace unos dos meses, nos dijeron que no iba a haber ningún problema --relató Badano--. El viernes último, sin embargo, nos dijeron que no era factible. Llamativamente, la respuesta fue verbal, por teléfono. No nos han dado los argumentos. Sólo nos dijeron que el único lugar viable era el Museo Aeronáutico". El lunes, los familiares le pidieron a la empresa una respuesta por escrito, que hasta ayer no había llegado. Los familiares pensaban inaugurar el monumento el 9 de octubre próximo, un día antes del aniversario de la tragedia, para cuando tienen previsto viajar hasta el lugar del accidente.
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