Leyendo el informe Starr
Apenas entró el viernes el informe Starr en la red de redes, los ojos
ávidos de millones de norteamericanos buscaron, y encontraron, detalles
"escabrosos" sobre las prácticas "impropias" de su presidente Bill
Clinton con la ex pasante de la Casa Blanca Monica Lewinsky.
Pero está por verse si el cigarro y otros juguetes sexuales alcanzan
para un proceso de destitución en regla.
The New York Times Magazine
Todos tienen teorías distintas sobre el fiscal especial Kenneth Starr.
Cuando estalló el affaire Lewinsky, Hillary Clinton dijo de él que era "un fiscal
con motivaciones políticas, aliado con los opositores derechistas". Harold Ickes, un
ex asistente de Clinton, dice que Starr es un peligroso moralista para quien los Clinton
son "como Sodoma y Gomorra, y que quiere sacar de Washington por cualquier método a
la pareja presidencial". Probablemente haya algo de verdad en estas motivaciones, y
en otras --Starr sintió un deber cívico y religioso, se aburría en su trabajo anterior,
extrañaba la atención pública, no supo decir que no--. Pero las explicaciones únicas
no son suficientes.
The Washington Post
En una declaración muy publicitada, un viejo amigo y aliado político
de Clinton, el senador demócrata Joseph Lieberman, afirmó que las relaciones del
presidente con Monica no habían sido sólo "inapropiadas", sino inmorales y
dañinas. No se limitaban a contradecir los valores que el presidente, cuando hablaba en
público, decía sostener, sino que además había engañado a muchos, incluyendo a
Lieberman mismo, que habían creído en sus palabras. Lieberman habló con una claridad y
un sentido del deber público cuya ausencia se sigue extrañando en el presidente de
Estados Unidos. Pero estas cualidades, sin embargo, son las que Clinton tiene que
arreglárselas para encontrar si quiere salir de la mejor manera posible de la situación
en la que se encuentra.
(Editorial)
The New York Times
Al final de uno de los peores días que haya vivido cualquier
presidente norteamericano moderno, Bill Clinton tiene que realizar un esfuerzo político
gigantesco para obtener un perdón que hubiera conseguido con facilidad si le hubiera
dicho la verdad al electorado. Pero en vez de eso dijo que no con el dedo, y negó haber
tenido sexo "con esa mujer, Miss Lewinsky". Por ahora, muy poca gente --pero eso
incluye al presidente Clinton-- sabe si las 36 cajas del informe contienen información
que pudiera quebrar para siempre su situación ante el pueblo y ante su propio partido. El
presidente, que siempre tiene tantos problemas con la verdad, dijo por lo menos una
oración veraz: "La culpa de todo lo que me pasa la tengo yo".
(Editorial)
Rusia con premier
La aprobación el viernes de un nuevo premier por la Duma (Cámara
baja del Parlamento) parece despejar el caos político y social en el corto plazo.
Yevgueni Primakov es un ex jefe en el espionaje soviético y ex ministro de Relaciones
Exteriores. Fue votado gracias al apoyo de la mayoría parlamentaria comunista, y la
designación en puestos claves de ex funcionarios de la URSS arrojó sospechas sobre el
compromiso del nuevo premier con las reformas económicas que le reclaman los
neoliberales.
The Washington Post
A pesar de que la posición de Primakov pueda parecerles imprecisa a
muchos, está más cerca de lo que parece de la del rechazado oligarca Victor
Chernomyrdin. El plan de este último incluía a la vez imprimir dinero para fomentar el
crecimiento, pagar los salarios adeudados y perseguir a los evasores de impuestos. Muchos
observadores piensan que esta fórmula es inútil en el mejor de los casos, y que en el
peor es la receta del desastre. Por lo menos, Primakov llega al poder con el apoyo
del amplio alfabeto ruso de partidos políticos. Su nominación fue la salida al
estancamiento político. Uno de los atractivos, y lo que lo diferencia de Chernomyrdin, es
que Primakov nunca dijo que quisiera suceder a Yeltsin. Así, les deja el camino abierto a
otros ambiciosos.
(Daniel Williams)
Forbes Global Business and Finance
El centro de los problemas rusos es institucional. El país no posee el
conjunto de instituciones económicas necesarias para sostener una cuidadosa situación
fiscal y una moneda estable; peor aún, no cuenta con las condiciones de mercado que
permitirían un crecimiento económico genuino. Lo que Rusia necesita aún hoy es
introducir instituciones fiscales y monetarias cuidadosamente planeadas. Construir
instituciones al mismo tiempo que una economía se derrumba no es una tarea fácil. Pero
por otro lado, los períodos de crisis brindan nuevas oportunidades para que los
reformistas impulsen grandes cambios estructurales. Los problemas macroeconómicos rusos
pueden ser resumidos en la deuda del gobierno central.
(Domingo F. Cavallo)
International Herald Tribune
Son los comunistas los que estuvieron insistiéndole a Yeltsin para que
rechazara las demandas del FMI y de Occidente de que las reformas deben ser mantenidas e
incluso expandidas. Argumentando que la ayuda occidental perjudica a Rusia, y que por otra
parte Occidente por ahora no va a ofrecer más ayuda, los comunistas pidieron que se dé
marcha atrás con las reformas. Quieren volver a nacionalizar la economía, imponer
controles de precios y salarios, restablecer la planificación central y acabar con el
ideal de la convertibilidad del rublo. En otras palabras, quieren volver al pasado. En la
posición comunista está implícito el rechazo a la idea de que para Rusia la salvación
está en aliarse con Occidente.
(George Friedman)
"El último 11"
Así llamó la prensa chilena al 25 aniversario del golpe de Estado en
el que el general Augusto Pinochet derrocó al presidente Salvador Allende. Los
enfrentamientos del viernes 11 provocaron dos muertos, 50 heridos y 300 detenidos. Para
varios sectores de la sociedad chilena, sin información sobre los desaparecidos no es
posible hablar de ninguna "reconciliación".
La Tercera
La historia no la podemos analizar como un trozo desmembrado y separado
de una continuidad y armonía integral (...) Parcializar la historia y practicar el
reduccionismo contribuye poco a la realidad de Chile. Vemos en estos días la
proliferación de la cultura de izquierda, que con todo lo atractiva, colorida y sonora
que es, levanta toda una idealización de héroes y mártires, de promesas incumplidas y
conquistas populares, que se corona con poemas, cánticos y jornadas de homenaje que, con
todo el respeto que merecen los personajes involucrados, dista bastante de ser la imagen
real de los tiempos vividos.
(De una columna de opinión de Miguel Angel Poduje.)
La Nación
La palabra "perdón" está muy usada y tal vez no produce
mucho efecto. Los militares tienen que reconocer la gama de violaciones de los derechos
humanos que hicieron sobre la base de un falso estado de guerra (...) No hubo tal estado,
sino que fue una invasión del país que convirtió a todos los funcionarios de la Unidad
Popular en delincuentes (...) Pinochet, un jefe de la dictadura equivalente a las
totalitarias de Europa y Rusia, no tiene el derecho de afirmar que no posee
responsabilidades (...) Las víctimas pueden perdonar, pero eso es pedirles demasiado
cuando no se ve por el otro lado ningún espíritu para que sea posible el perdón.
(Jaime Castillo Velasco, presidente de la Comisión Chilena de
Derechos Humanos.)
Las Ultimas Noticias
Como joven nacido después del 11 de septiembre de 1973, aspiro a que
no nos traspasen esa carga permanente de tensión y pelea. Si la generación que
participó en esa fecha no es capaz de reconciliarse, no es justo que nosotros heredemos
ese conflicto. Nuestra generación no tiene la obligación de pronunciarse sobre lo que
pasó en 1973, sin perjuicio de que se reconozca el dolor que hay detrás de lo que pasó.
Tenemos el derecho a vivir en un país sano y reconciliado (...) Crecí en un ambiente de
tensión y odio de un lado hacia el otro y eso afecta mucho, porque lo que queremos es un
país que resuelva sus problemas.
(Eduardo Díaz, diputado independiente cercano a la derechista UDI.)
TEMA LIBRE
El sol inerte
The New York Times
Washington y Wall Street se preocupan porque las medidas anémicas
que adoptó Japón van a conservar a su economía en terapia intensiva, pero van a ser
incapaces de ayudar a la recuperación económica en toda Asia. Incluso, pueden llevar a
un colapso financiero tan terrible que todo lo que vivimos en las últimas semanas parezca
sólo un precalentamiento. Como señaló Kenneth Courtis del Deutsche Bank, Japón está
hoy más internacionalmente aislado que nunca desde 1930. Los funcionarios japoneses
siguen debatiendo los criterios para auditar a los bancos con deudas incobrables. Y, entre
tanto, los que tienen poder siguen interesados en que se mantenga el statu quo.
(Steven R. Weisman)
Miedo a los talibanes
Der Spiegel
La victoria ya casi total de los talibanes en Afganistán ha
aterrado a sus vecinos del norte. Temen que estos "estudiantes de teología
coránica" crucen las fronteras y terminen de internacionalizar el conflicto. El más
asustado parece la ex república soviética de Tadjikistán, el baluarte de Rusia contra
el peligro islámico. El temor en todos los países del Asia Central a los talibanes y a
sus simpatizantes inquieta a políticos y militares. También el presidente de
Uzbekistán, Islam Karimov, interrumpió sus vacaciones y corrió a apostarse en una
ciudad fronteriza. Karimov tiene buenas razones para apurarse: en su país la oposición
islámica es cada vez más fuerte. |