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Menos educación y más represión
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| Por Maximiliano Montenegro
Ayer Página/12 adelantó exactamente los mismos datos del Presupuesto '99 que Roque presentó por la tarde en Diputados. Sin embargo, sus colaboradores incurrieron en una picardía: en lugar de comparar en la síntesis de prensa esas cifras con el Presupuesto '98, como es habitual, lo hicieron con los números del gasto ejecutado este año, que ya incluyen un ajuste sustancial sobre las partidas sociales. "Si comparábamos respecto del Presupuesto '98 iba a quedar una diferencia abismal y un ajuste mucho mayor sobre seguridad social y gastos sociales", reconoció, ante la consulta de este diario, un estrecho colaborador de Hacienda. De todos modos, el sesgo del ajuste es tan evidente que ni siquiera esa jugarreta contable puede encubrirlo, como se revela en lo que sigue: * Las erogaciones en "servicios sociales" se recortan en 296,8 millones de pesos comparado con el ejecutado de este año. En relación al Presupuesto '98 la poda alcanza a 491 millones de pesos. * Los aumentos más notables son en seguridad y Defensa. Las fuerzas armadas contarán con 110 millones más que este año. En tanto, Carlos Corach consiguió unos 32 millones más para la Policía Federal. "¿Cómo decían los estudiantes: más educación y menos represión? Bueno, esto es al revés", se rió ante este diario el diputado oficialista especialista en temas presupuestarios. A la Side no se le restó un peso de su cuenta. * Corach contará con otra partida en franco crecimiento: el rubro "relaciones interiores" aumentará en 100 millones en relación al Presupuesto del '98. En Economía dicen que es lo que previeron por las elecciones del año próximo, pero esa partida ya aumentó este año en 50 millones por encima de lo presupuestado. Es decir, ya se gastaron la mitad de la caja prevista para las elecciones '99. * Se pagarán en intereses de la deuda 1040 millones más que este año. Por cada peso de gasto público casi 16 centavos se destinarán a honrar compromisos con acreedores externos. * Crecerán los subsidios del Gobierno a los concesionarios de transporte público en 130 millones, y María Julia contará con 45 millones más que este año para preservar la ecología y el medio ambiente. * Las áreas que sufrirán la tijeran son salud, que contará con 75 millones de pesos menos que lo ejecutado este año y 196 millones versus lo presupuestado para el '98. En Educación, el recorte es de 25 millones; en Ciencia y Técnica de 23 millones; en programas de asistencia social de 37 millones; en programas de vivienda de 72 millones; y en planes oficiales de empleo de 7 millones. * El proyecto deja por sentado que no habrá transferencias del Tesoro para cubrir agujeros financieros en el PAMI y tampoco habrá préstamos para las obras sociales como contrapartida de los fondos que aporta el Banco Mundial. * En Seguridad Social la quita alcanza a 60 millones de pesos y a 150 millones comparado con el presupuesto para este año. "En 1999 se propone fijar un tope a las jubilaciones superiores a 2500 pesos para financiar los pagos de la PBU a las AFJP, los aumentos en las pensiones no contributivas y los incrementos en los haberes por efecto de las sentencias judiciales liquidadas", dice el proyecto de Economía. Pero es difícil que este artículo, que ya encontró en años anteriores la oposición incluso de los diputados oficialistas, sea esta vez aprobado. Por lo tanto, Economía reconoce que habrá problemas para abonar jubilaciones, pensiones e incrementos de haberes por sentencias judiciales. * En "administración gubernamental" habrá una reducción del gasto de 55 millones de dólares en relación al ejecutado de este año. Pero éste superó en unos 125 millones al gasto fijado en el Presupuesto. Aún así, el área que más fondos resignará será la Administración Federal de Ingresos Públicos, que comanda Carlos Silvani: deberá arregárselas con 71 millones menos para perseguir evasores y cobrar impuestos.
El presupuesto de Roque no sabe de crisis
Roque Fernández, al enunciar los supuestos macroeconómicos bajo los que se elaboró el Presupuesto, no dio explicación para justificar la brusca interrupción de la crisis que espera para cuando se inicie el próximo año o sobre cómo hará Latinoamérica para mantenerse ajena a sus efectos. El horizonte económico que Roque dibujó para los próximos tres años muestra una paulatina desaceleración de la inversión, que pasaría de una tasa de crecimiento anual del 13,5 por ciento para 1998, al 9,1 por ciento en el '99 y al 8,8 y 8,3 por ciento en los dos años siguientes. El PBI, en cambio, crecería a una tasa anual del 5,5 por ciento en los años 2000 y 2001. El consumo mejoraría su ritmo de crecimiento, al pasar del 4 por ciento en el '98 al 4,1 en el año siguiente y al 4,7 por ciento en cada uno de los dos posteriores. El déficit en la balanza comercial seguirá creciendo, ya que --según explicó el ministro-- el aumento de las importaciones seguirá atado al del PBI, con tasa decreciente (12,4 por ciento en 1998 y 8,7 en el 2001). Las exportaciones se mantendrían en un aumento anual del orden del 10 por ciento. Como resultado, el desequilibrio comercial llegaría este año a 7938 millones de dólares, sería superior a los 8500 en 1999 y alcanzaría los 8870 en el 2001, con exportaciones por algo más de 42.500 e importaciones por 51.380 millones de dólares. Bajo estos supuestos, el déficit en cuenta corriente (que incluye, además, los pagos internacionales de servicios e intereses) alcanzaría en el '99 a 13.800 millones de dólares, una cifra que "está lejos de comprometer nuestra solvencia externa", aseguró. Un fallido de Roque en su discurso ante la comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados mostró su impaciencia por dejar atrás el actual peligro de recesión mundial. "La recuperación de la crisis, perdón, la repercusión de la crisis...", tropezó al leer el mensaje que acompañó la presentación. Señaló que la economía argentina había mostrado su solidez frente a la crisis internacional más aguda del siglo y enfatizó que los países de Latinoamérica "sobrellevarán el impacto". Una referencia que llevó a todos los presentes a pensar que estaba refiriéndose, específicamente, a Brasil. Otro resultado que Economía espera de una pronta salida de la crisis internacional es la recuperación en el precio de los commodities --bienes primarios--. La depresión de los valores se reflejaría en una baja en el índice de precios implícitos del 0,6 por ciento este año (una combinación entre mayoristas y costo de vida), y su posterior alza en un aumento del mismo indicador del 1,7 por ciento anual en los dos períodos siguientes.
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"Este es un presupuesto que recorta servicios sociales
para aumentar gastos en seguridad y el pago de intereses de la deuda. Espere que me tome
unos días para estudiar cómo hago para defender esto." Un encumbrado diputado
oficialista de la Comisión de Presupuesto y Hacienda definió así ante Página/12
el proyecto de ley de Presupuesto '99 dejado ayer por Roque Fernández en el Congreso.
Como anticipó este diario, todo el peso del ajuste del gasto público, exigido por el
pago record de intereses de la deuda, recaerá sobre las áreas sociales: educación,
salud, seguridad social, trabajo y vivienda, entre otros. En cambio, aumentarán las
erogaciones para las fuerzas armadas y la seguridad interior. Y el Gobierno contará con
una generosa partida para solventar las elecciones: 100 millones de pesos que,
curiosamente, ya empezó a gastar este año. Habrá problemas con el pago a los jubilados
y pensionados. Por eso, Economía insiste con aplicarle un tope a las jubilaciones de más
de 2500 pesos, una iniciativa que, como ocurre año tras año, le bochará el Congreso. 