|
|
|
|
|
|
|
|
|
Por Eduardo Videla
Los procedimientos fueron casi simultáneos y se iniciaron alrededor de las 15. El primero se llevó a cabo en Sáenz Peña 1043, donde Telefé tiene sus estudios y Susana las oficinas de su producción. Hasta allí se dirigieron el fiscal Niklison, su secretaria, Cecilia Kelly, y un oficial de Defraudaciones y Estafas, el inspector Daniel Rodenas. Los investigadores llegaron incluso hasta el camarín de la conductora en busca de un contrato entre la empresa Hard Communication --organizadora del controvertido concurso telefónico-- con la producción de Susana Giménez, documentación que no encontraron porque --según asegura la animadora-- "no existe". Lo que sí secuestraron fue un contrato entre Hard Communication y Telefé, que el propio abogado de Susana, José María Figuerero --que se hizo presente casi de inmediato al lugar-- fue a buscar hasta las oficinas del canal, en Pavón 2444. Eso trámite hizo que el procedimiento se prolongara durante más de tres horas. Durante ese lapso, Susana llegó al estudio, aunque no alcanzó a cruzarse con el fiscal ni con los policías. Mientras tanto, iban llegando los invitados al programa --Ignacio Copani, Víctor Heredia, Amelita Baltar, Manuel Wirtz, entre otros-- que se encontraban ante un extraño cuadro: una multitud de periodistas que quería saber qué estaba ocurriendo adentro. El allanamiento concluyó a las 19.25. A esa hora salieron Niklison con sus colaboradores, que llevaban unas carpetas y sobres de color blanco con la documentación secuestrada. "El resultado del procedimiento fue positivo", se limitó a decir el fiscal. Confirmó que paralelamente se había realizado otro procedimiento, pero se negó a dar más datos. Una versión aseguraba a esa hora que los otros allanamientos habían tenido como objetivo las oficinas de HC, en Vicente López, y Telinfor, empresa de audiotexto. Esa información fue desmentida: el segundo operativo se realizó en Alicia Moreau de Justo 1120, primer piso, oficina 104 "A". Allí funciona la empresa Entertainment Production Group SA (EPG), una firma que tendría a su cargo el seguro de los juegos de azar. Concretamente, habría asegurado el concurso "Su llamado", organizado por HC, informaron a Página/12 fuentes vinculadas con la investigación. La empresa había sido mencionada por el padre Julio Grassi, titular de la fundación Felices los Niños, en su declaración ante el juez Cubas y el fiscal Niklison, el martes último. "Tres meses después de firmar el convenio, en diciembre del año pasado, la gente de Hard Communication nos dijo que se habían olvidado de incluir el seguro del juego que, aseguraban, era obligatorio", dijo anoche el padre Grassi a Página/12. La abogada de Grassi, Eleonora Valet, agregó a su vez que EPG habría contratado el seguro en la compañía La Meridional. El contrato se habría convertido en uno de los ejes de la investigación de Cubas: el padre Grassi sostiene que HC debía pagar a su fundación el 7 por ciento del dinero facturado por los llamados --1,5 millón de pesos--, pero al final recibió sólo el 7 por ciento del neto, deducidos los gastos --unos 400 mil pesos--. Entre esos descuentos, estaban los gastos por "seguro de premios" (457.604 pesos, según la información de HC) y por publicidad en el mismo canal (2,5 millones). Hacia la legitimidad de estas facturaciones estaría apuntando la investigación del juez. Con los allanamientos de ayer volvió a cobrar impulso la causa originada en la denuncia de Raquel Jaskelson, damnificada por una supuesta sobrefacturación de llamadas a Susana Giménez. Esa fue la primera de una serie de denuncias contra el programa de Telefé (ver aparte), que pusieron en tela de juicio la transparencia de los juegos de azar telefónicos y originaron una investigación de consecuencias ahora insospechadas.
LA REACCION DE LA CONDUCTORA EN SU PROGRAMA Por Cristian Alarcón
La diva tenía preparado el discurso para esta ocasión. Una mezcla de desconcierto y gracia, como suele hacer para salir de cualquier equivocación. Dijo, como burlándose de las primeras inexactitudes de la prensa de ayer, que las radios habían estado toda la tarde con un allanamiento en Hard Comunication. "No estaban en Hard Communication. Estaban allanando ¡acá!", gritó e indicó con los dedos el piso del canal. Enseguida apareció la grabación de la requisa. "¡Mi camarín! Miren. ¡Mi camarín!". "Buscaban un contrato mío con Hard Comunication. Pero es Telefé quien tiene el contrato. Buscaban algunos papeles. Los teníamos en el canal y se los han traído --explicó, para irse al borde de la ironía--. Les agradezco que investiguen y que sigan adelante". Ya tenía pensada una propuesta para el final feliz que desea. "Así se termina. ¡Por favorrrr!", largó. "Y ese día yo me iré...". Entonces recordó a su buen amigo Marcelo Tinelli. "Se fue por lo de San Lorenzo a Luján. Yo me voy a ir por esto". --¿Caminando? --le preguntaron desde detrás de cámaras. --Mañana les cuento --dijo dudosa--. Mañana les cuento. Hoy me voy al festival del chiste. En una ronda en torno de dos humoristas --Carlos Sánchez y Beto César--, esperaban para competir contando un chiste dos equipos de cantantes. Por un lado Víctor Heredia, Amelita Baltar e Ignacio Copani. Por el otro Antonio Tarragó Ros, Manuel Wirtz y la ausencia de Gladis la Bomba Tucumana, que llegó tarde. "Le tuvo miedo al allanamiento. Como es una bomba...", tiró el chistoso de Sánchez, en lo mejor de su performance. "No quiso complicarte", terció la Baltar. "Una bomba en mi camarín", cerró Susana con media sonrisa. El tema del día continuó. Tarragó se sentó al medio para una anécdota de sus pagos. --Voy a cambiar los nombres, no sea cosa que vaya preso --dijo. --No los cambies-- le pidió Susana, entre chismosa y mal intencionada. --¡Ya que estamos!-- le contestó el chamamecero, y revoleó el brazo en señal de vamos todos presos.
LAS CAUSAS POR EL JUEGO DEL TELEFONO
El juez Facundo Cubas investiga, por un lado, la presunta estafa cometida por Hard Communication contra la Fundación Felices los Niños del padre Julio Grassi. Por otro, la denuncia en febrero de la abogada Raquel Jaskelson por llamados al concurso de la conductora aparecidos en su factura telefónica que ella dice no haber realizado. Los allanamientos promovidos ayer por Cubas obedecieron a la orden dada una semana atrás por la Sala I de la Cámara Criminal porteña. De acuerdo con ese fallo, Cubas debe continuar la investigación sobre la conductora y los directivos de Hard. El caso se abrió por Jaskelson, quien denunció comunicaciones al 0939-1-2222, concurso Su Llamado, registrados en su factura telefónica. En primera instancia Cubas había sobreseído a los responsables del concurso. Como el destino del dinero recaudado en los concursos era la fundación de Grassi, Cubas dejó abierto este aspecto del caso y lo elevó --junto a informes sobre posibles evasiones tributarias-- a las Cámaras del Crimen y en lo Penal Económico para que dispusieran si debían ser investigadas otras figuras penales. Por su parte, el fiscal Martín Niklison apeló el sobreseimiento y pidió que se investigara el destino de esos fondos. Por ese motivo, el 23 de setiembre la Cámara se pronunció considerando prematuro el fallo de primera instancia. Sobre el caso Jaskelson, el tribunal observó "serias presunciones" de que las llamadas al programa fueron hechas desde otra línea de teléfono. En paralelo a esta causa, la jueza María Angélica Crotto investiga 170 denuncias similares que podrían unificarse en el juzgado de Cubas, que desde mayo tiene abierta la causa Jaskelson. En cuanto a la presunta estafa a la fundación de Grassi, el fiscal Niklison cuestionó la forma en que se repartieron los 18 millones de pesos recaudados. Grassi esperaba recibir 1,5 millones de pesos, pero cobró apenas 400 mil. Un 7 por ciento de los 2,5 millones pagados por Hard a Telefé, podrían corresponderle también a la fundación.
|
La Justicia apuntó ayer
directo al corazón de Susana Giménez: una comisión de la
división
Defraudaciones y Estafas de la Policía Federal al mando del fiscal Martín Niklison
allanó las oficinas de la producción del programa conducido por la diva, ubicado en los
estudios que Telefé tiene en Constitución, y secuestró "importante documentación,
aunque no toda la que se buscaba", según revelaron a Página/12 fuentes
vinculadas con la investigación. Otra comisión policial allanó la sede de la empresa
Entertainment Production Group SA, ubicada en Puerto Madero. "El resultado del
procedimiento fue positivo: se secuestraron contratos, facturas y documentación
contable", reveló la fuente. Los procedimientos fueron ordenados por el juez Facundo
Cubas, quien investiga a Susana Giménez y a los directivos de la empresa Hard
Communication (HC), Jorge Born, Rodolfo Galimberti y Jorge Rodríguez --novio de Susana--
por el presunto delito de estafa contra la Fundación Felices Los Niños y por supuestas
irregularidades en la facturación de llamadas telefónicas al concurso "Su
llamado".