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Un juez quiere saber por qué se fuma en clase en la Universidad

La Justicia pidió informes a Arquitectura por el humo en las aulas. La causa fue iniciada por una alumna: la mujer árbitro.

Florencia Romano es la primera mujer árbitro en el país.
Pidió que la Facultad haga cumplir la prohibición de fumar.

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Por Mariana Carbajal

t.gif (67 bytes) Florencia Romano, la primera mujer árbitro del fútbol argentino, quiere aplicar el reglamento también fuera de la cancha. Pero en lugar de sacar la temida tarjeta roja, presentó una medida cautelar en la Justicia. Es que el tema que la tiene hoy como protagonista está lejos de una Nº 5: molesta por el humo de cigarrillos que soporta en las clases de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU), donde es alumna de tercer año, solicitó al juez Guillermo Rossi que ordene a las autoridades académicas el cumplimiento de una resolución del '94 que restringe la posibilidad de fumar en las aulas. Ayer el magistrado envió un escrito a la facultad pidiéndole explicaciones.

"Ella pretende aplicar la reglamentación en todo el edificio pero la prohibición rige sólo en las aulas donde se dictan materias teóricas", respondió a Página/12 el subsecretario general de la FADU, Marcelo Sanés. La resolución 697 fue aprobada por unanimidad por el Consejo Directivo cuatro años atrás, luego de que a través de un plebiscito los alumnos se inclinaran por abrumadora mayoría a favor de la prohibición de fumar en las clases en que se dictan materias teóricas. "La veda no alcanza a las aulas donde se cursan talleres, porque los alumnos trabajan en mesas amplias, en un clima más flexible", explicó el arquitecto Sanés.

Sin embargo, para Florencia Romano, de 27 años, no hay diferencias. El humo del cigarrillo le hace arder la nariz, le da dolores de cabeza y afecta su rendimiento profesional en las canchas de fútbol. Un año después de plantear su problema por carta al decano Berardo Dujovne y al Centro de Estudiantes, decidió recurrir a la Justicia con una medida cautelar innovativa. "A nuestro entender la prohibición debería alcanzar a todas las aulas. En la resolución 697/94 no hay fundamentos que justifiquen el permiso de fumar en algunas clases y en otras no", señaló a Página/12 el abogado Gustavo Romano Duffau, patrocinante legal de Florencia, quien por otra parte reveló que estudiantes de las facultades de Medicina, Ciencias Sociales y Derecho le plantearon inquietudes similares.

Más allá de la discrepancia en relación a los alcances de la prohibición, lo cierto es que la medida no se cumple con rigidez, según admitió a Página/12 el propio Sanés. Y por otra parte, en las aulas de talleres la ventilación es deficiente, reconoció el presidente del Centro de Estudiantes, Guillermo Meyer.

Ayer la FADU recibió el pedido de informes del juez en lo contencioso administrativo federal Guillermo Rossi. La facultad tiene tres días para responder al magistrado por qué no se cumple en las aulas con la prohibición de fumar.

En el Centro de Estudiantes no comparten el camino legal elegido por Florencia. "Es un problema de diálogo y convivencia. Si a alguien le molesta el cigarrillo puede pedirle al compañero que fuma que lo apague. Hay cátedras en las que se decide no fumar y se sale a los pasillos a prender un cigarrillo", señaló Meyer. "Antes de tomar medidas legales debería haber exhortado a la gente a tomar conciencia sobre el daño que le provoca el cigarrillo. Este año, un alumno del CBC que cursa Introducción al Conocimiento Proyectual nos planteó que le molestaba el humo. Fuimos al aula y lo planteamos. Finalmente se resolvió, sentándose con otros chicos que no fumaban, en una mesa cerca de la ventana", explicó Patricia Ceriani, candidata a presidente del Centro de Estudiantes por Franja Morada.

Pero Florencia Romano demostró siempre ir bien al frente. Maestra mayor de obras, saltó a la fama dos años atrás cuando denunció en la Subsecretaría de Derechos Humanos, que depende del Ministerio del Interior, que la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) la discriminaba al negarle la posibilidad de homologar su título de árbitro obtenido en Tucumán en el '92. Y después subió su apuesta con una huelga de hambre frente a la AFA hasta que consiguió su cometido.

 

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