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Por Ariel Greco  La guerra ya está
declarada. Lejos de amedrentarse, Javier Castrilli prosiguió con su quijotesca lucha
contra el poder político del fútbol, el Colegio de Arbitros y la empresa Torneos y
Competencias, y anunció que seguirá hasta las últimas consecuencias. Ante la Comisión
de Deportes de la Cámara de Diputados, Castrilli ratificó todas las imputaciones que
formuló contra el presidente del Colegio de Arbitros, Jorge Romo; el titular de la AFA,
Julio Grondona, y el empresario televisivo Carlos Avila. Por ese motivo, tanto Romo, como
Grondona y Avila serán invitados en las próximas semanas por la Comisión para exponer
sus descargos, además de las autoridades de la Asociación Argentina de Arbitros (AAA) y
del Sindicato de Arbitros de la República Argentina (SADRA). Asimismo, se confirmó que
uno de los hijos del ex juez fue amenazado, aunque los diputados y Castrilli negaron la
manera como fue intimidado. “Ratifico todo lo que salió publicado en los medios en los últimos días. No me arrepiento de nada, sólo quiero que se sepa la verdad y nada más que la verdad”, resaltó Castrilli en la improvisada conferencia de prensa que se brindó tras la reunión de más de dos horas y media que mantuvo con 17 integrantes de la Comisión, entre los que se encontraban el presidente, Daniel Scioli; los vicepresidentes, Alfredo Bravo y Juan José Chica Rodríguez (titular de San Martín de San Juan, uno de los pocos clubes que mandó la lista de barrabravas solicitada por el juez Víctor Perrotta); y los secretarios Jorge Benedetti, Julio Salto y Javier Mouriño. Además, Castrilli desmintió que su futuro esté en la política: “En virtud de las versiones, aseguro que no tengo ninguna intención política. Por eso no tendré reuniones con ningún partido”, destacó. A pesar de su constante negativa por brindar detalles de la charla –“yo no cité a la conferencia”, fue su argumento–, trascendió que Castrilli nombró a Aníbal Hay como uno de jueces que viaja seguido al Caribe, aunque los diputados se encargaron de explicar que sólo fue un nombre mencionado y que no había ninguna acusación concreta. Sin embargo, en declaraciones radiales Aníbal Hay se mostró muy molesto por las aseveraciones de su ex colega. “Yo no tengo que hacer ningún descargo, pero sí tengo que decir que esto afecta a mi apellido, que llevan mi esposa y mis hijos. Es verdad que viajé al Caribe, pero lo hice con mi familia. Hoy en día viajar al exterior no es un endeudamiento tan grave”, aseguró Hay, quien aclaró que no sabe si va a mandarle una carta documento porque “las palabras de Castrilli no las escuché”. Otro de los comentarios se refirió a las supuestas declaraciones de Avila sobre la necesidad de que desciendan Ferro, Argentinos Juniors, Huracán y Platense. “Según nos reveló Castrilli, esas instituciones son clubes inviables para la empresa Torneos y Competencias, puesto que les hacen perder plata”, señaló el diputado frepasista Alfredo Bravo. Además, el ex árbitro acusó al empresario de manejar el fútbol en beneficio de sus intereses económicos. También denunció que uno de los hijos de Romo es empleado de TyC, algo que juzgó inadecuado y con lo que dejó traslucir la marcada influencia de Avila en el Colegio de Arbitros. La denuncia que también ratificó fue la de las presiones a las que son sometidos los referís jóvenes, ya que él cuenta con una lista de 34 amateurs que declararán ante la Justicia sobre la veracidad de sus dichos. “No sólo tiene pruebas sino que puso a diposición una nómina con personas que están dispuestas a prestar declaración, que acreditan lo que ha señalado Castrilli en los medios”, aseguró a Página/12 Ernesto Löffler, del Movimiento Popular Fueguino. Por su parte, el diputado jujeño Normando Alvarez García relató a este diario la forma en que el presidente del Colegio de Arbitros presiona a los jueces jóvenes. “Según Castrilli, Romo le recomendó a los jueces que no sean pelotudos –así lo que dijo él– como Fabián Mandorrán que echó cuatro brasileños en un torneo en Uruguay”, comentó Alvarez García. “Castrilli dio algunos nombres y explicó la forma en que se maneja el Comité Ejecutivo. Cuando un árbitro informa que algún dirigente le dice ‘este señor no me dirige más porque me perjudica al club’, el Tribunal de Disciplina se declara incompetente y lo pasa al Comité Ejecutivo. Pero como todos sus integrantes son directivos de los clubes, no toma ninguna medida”, explicó Alfredo Bravo. Uno de los nombres que mencionó Castrilli ante los legisladores es el del presidente de San Lorenzo, Fernando Miele. Tras un Vélez-San Lorenzo, Castrilli estuvo 78 encuentros sin dirigir al club de Boedo, cuando Miele lo descalificó públicamente.
“POR LOS ESCANDALETES”
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