Por Adrián H. Mouján
En momentos en que
los orteguistas brindan por el éxito de su acto en Atlanta y los duhaldistas ultiman
detalles del acto del próximo sábado 17 de octubre, un número importante de
gobernadores justicialistas comenzaron a cruzar llamados con altos funcionarios del
Ministerio del Interior. Colaboradores de Carlos Corach aseguraron que los mandatarios
provinciales lanzaron muy fuertes críticas a la actitud de ambos precandidatos del PJ y a
la forma en que realizan sus respectivas campañas electorales.
De Duhalde, los gobernadores consultados por este diario coincidieron en señalar que lo
que más nos molesta, es que no nos trata de igual a igual. Hay cierta prepotencia.
Nosotros somos jefes de distrito y quien sea el candidato va a tener que venir a buscar
nuestro apoyo con otros modos. Otro punto que le cuestionan al bonaerense son sus
críticas al modelo. No cae bien que Duhalde diga que el modelo está agotado,
cuando muchos de nosotros realizamos gestiones exitosas con este plan económico, le
dijo a Página/12 un gobernador litoraleño.
Esta situación se puso de relieve en la reunión de los gobernadores justicialistas
celebrado el fin de semana pasado en Santa Rosa, La Pampa, ya que allí y aprovechando la
presencia de Corach, Antonio Cafiero, el senador mendocino Eduardo Bauzá, el ministro de
Justicia, Raúl Granillo Ocampo y el titular de la Cámara de Diputados, Alberto Pierri,
cuestionaron severamente algunas actitudes de ambos candidatos.
La decisión de Duhalde de asistir al encuentro de El Calafate y pegar el faltazo al de La
Pampa causó una gran molestia entre sus pares peronistas. No se entiende por qué
Duhalde no asiste a las reuniones que venimos realizando. No tenía ninguna razón
objetiva para no ir a La Pampa, ya que en El Calafate recién habló el sábado al
mediodía. El no ir fue un desprecio, es una forma de cuestionar los encuentros que
tenemos con los compañeros gobernadores. Si es así como se comporta cuando es candidato,
no me quiero imaginar cómo va a ser cuando sea Presidente, agregó otro gobernador
peronista.
Pierri le transmitió a Duhalde las críticas de los gobernadores, pero el bonaerense aún
no realizó los gestos que los mandatarios provinciales esperaban, por esa razón durante
toda la semana pasada los líderes distritales cruzaron llamados entre sí y en los
despachos de la planta baja del ministerio del Interior tampoco pararon de sonar los
teléfonos. Exceptuando al bonaerense y al santacruceño Néstor Kirchner, el resto de los
gobernadores integra la lista de candidatos al Consejo Nacional que busca prolongar el
liderazgo partidario de Carlos Menem hasta el 2003.
Duhalde y Palito conocen el cuadro de situación. Los dos están metidos
en sus campañas, pero hasta ahora, ninguno recibió el apoyo público y explícito de los
gobernadores de los distritos más importantes que están en nuestras manos. Tiene que
haber un cambio de actitud, van a tener que esperar que nosotros definamos las internas en
nuestros distritos y después venir a sentarse a charlar, señaló un gobernador
cuyano.
Un operador del ministerio del Interior explicó ante una consulta de Página/12 que
lo de sentarse a charlar está dirigido a Duhalde. Los gobernadores quieren que
visite las provincias pero le pidieron que se baje del caballo. Con Ortega el problema
gira en que no lo conocen y despierta mucha desconfianza. Recibió el apoyo de (Jorge)
Escobar, (Carlos) Ferraro y (Angel) Maza pero ellos lo hicieron porque están muy
identificados con Menem.
Sobre Ortega, uno de los gobernadores confesó a Página/12 que da la impresión de
que a su alrededor está todo muy desorganizado y es medio vago. En La Pampa, varios
gobernadores dijeron haberlo invitado a que participara de actos en su carácter de
secretario de Desarrollo Social pero no fue. Inclusive, varios compañeros dijeron que ni
siquiera les había contestado los llamados.
LA VENTANA INDISCRETA
Los fisonomistas recuerdan haberlo visto en la Casa Rosada, en ocasión de
la jura de César Arias como secretario de Justicia, a fines del 89. Enrique Gustavo
Velázquez, Quique, actual titular del juzgado de Instrucción Nº 36, concurrió en
aquella ocasión acompañado por su padre, y dijo a diestra y siniestra a quien quiso
oírlo: hasta ahora les tocó a otros, ahora me toca a mí. Y le tocó. De la mano de su
padrino Arias primero fue fiscal y luego juez. Ahora tiene en sus manos la investigación
por la desaparición de Marcelo Cattáneo, y acaba de protagonizar una típica reyerta de
parroquia con su colega la jueza María Gabriela Lanz, a la que le sustrajo competencia
para hacer poco, según denunciaron los parientes de Cattáneo. Acaso la filiación
genética de su nombramiento explique por qué razón los hombres de Cavallo se
apresuraron a llevar el interrogatorio que Cattáneo les había dejado a Bagnasco, a pesar
de que Velázquez se había interesado por el documento. Refiriéndose a la servilleta de
Corach suelen repetir: no están todos los que son.
La reciente adjudicación a la empresa Siemens del proceso de renovación de los DNI
produjo una discreta pero expresiva corriente de entusiasmo en un piso alto del edificio
de Corrientes 316. Sucede que allí tiene su estudio Rodolfo Barra, ex juez de la Corte,
ex ministro de Justicia, ex convencional constituyente, y actual miembro del jurado que
enjuiciará a los fiscales, presidente del ente regulador de los aeropuertos, y lobbysta
de la empresa adjudicataria de la factura de los DNI, que costarán 30 pesos cada uno, IVA
y delivery incluidos. Sin embargo, no todo era confianza en aquella tarde de la
celebración anunciada; algún colaborador cercano al supernumerario del Opus Dei dejó
deslizar: Ahora hay que estar más alertas que nunca. Cuando se trata de distribuir
mangos, el Petiso es capaz de tomarle la leche al gato.
***
Rolando Contreras, el abogado que motorizó en San Luis el
entierro de la Justicia y que logró que los miembros de la familia Amitrano,
injustamente acusados por el poder político de un crimen que no habían cometido,
recuperaran su libertad, está en Buenos Aires. Viajó para filmar un programa televisivo
donde promete ven- tilar nuevas pruebas que incri-minan en malos manejos sobre los
tribunales al gobernador de San Luis, Rodríguez Saa. Desde allá no hay nada que
hacer confesó a un puñado de íntimos. Con la décima parte de lo que hemos
probado, en Buenos Aires ya hubiera saltado el gobierno nacional. Su peregrinar
muestra que la valentía de su defensa a los Amitrano no ha disminuido; tampoco sus
esperanzas.
***
Vestida totalmente de negro, y exhibiendo orgullosa curvas que cualquier
adolescente envidiaría, la actriz Ana María Picchio se sentó en el sector VIP que
había dispuesto en el campo de juego del estadio de Atlanta para escuchar el discurso de
su amigo Ramón Palito Ortega. Pocos minutos antesde que se iniciara el acto, un
colaborador del precandidato presidencial del PJ se asomó y la llamó para que la actriz
pudiera acompañar entre bambalinas a su amiga Evangelina Salazar, que estaba nerviosa
ante el debut electoral de su marido.
***
Los organizadores de la campaña de Graciela Fernández Mei-jide quedaron
bastante contrariados luego del paso de la candidata por la provincia de Neuquén. Y no
precisamente porque a Graciela no le fuera tan bien como esperaban. No fue eso. Lo que
sucedió fue que nadie les avisó que el viernes a la noche había un importante festival
de folklore provincial que reunió a unas cinco mil personas en un estadio a minutos del
hotel donde, por esas horas, ya descansaba la diputada. Y pensar que la hicimos
hablar en un cine con 300 personas, se lamen- taban los operadores mientras
escuchaban el festival que las radios locales transmitían en cadena. |
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