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Por Adrián de Benedictis  Javier Castrilli no
quiso hablar ante la prensa agolpada en Tribunales, pero amplió sus denuncias ante el
juez Víctor Perrotta. En tanto, el fiscal Marcelo Retes pidió la apertura de una causa
penal para investigar si los árbitros de fútbol son amenazados para manipular sus
arbitrajes por orden de los dirigentes. Por su parte, Julio Grondona envió un informe por
escrito a Perrotta expresando su posición en las denuncias de Castrilli y señaló que
“no me voy a presentar a declarar porque no estoy citado”. En cambio, el
técnico César Menotti deberá presentarse mañana. Javier Castrilli se excusó de efectuar mayores precisiones a la prensa, tras completar sus declaraciones, que se extendieron por espacio de cuatro horas ante Perrotta, pero dijo que “ratifiqué todo lo dicho anteriormente ante la Comisión de Deportes de la Cámara de Diputados” la semana pasada. “Nos explicó que los árbitros no tienen libertad para dirigir y que se sienten degradados por la AFA. Sinceramente, no tuve mucho tiempo para examinar lo declarado por Castrilli, pero no varió de lo que comentó en la Comisión de Deportes”, le dijo el juez Víctor Perrotta a Página/12. Según fuentes judiciales, el ex árbitro presentó una lista de los jueces que participaron del encuentro en el que el presidente del Colegio, Jorge Romo, habría volcado sus “sugerencias” sobre la forma en que había que dirigir los encuentros. Por su parte, el fiscal del crimen Marcelo Retes solicitó al juez de instrucción Mauricio Zamudio que abra una causa penal para investigar “si los árbitros de torneos oficiales de la AFA fueron víctimas de coacción y amenazas”. El fiscal tomó en cuenta la denuncia del secretario general del Sindicato de Arbitros de la República Argentina (SADRA), Guillermo Marconi, a raíz de declaraciones públicas realizadas por Castrilli. Además de Castrilli y Perrotta, de la audiencia participaron el titular de Fair Play, Sergio Ramírez Chagra; el apoderado de esa fundación, Gustavo Romano Duffau, y el abogado Mario Schmoiman por la AFA, que a través suyo impugnó la declaración del ex árbitro. Las mismas fuentes indicaron que Castrilli contó un episodio en el que el entonces defensor de Boca Néstor Fabbri había sido expulsado por hacerle con sus manos un gesto al asistente Mario Rattalino, en el que le daba a entender que habría cobrado dinero “por perjudicar” a su equipo. Rattalino fue “parado” a raíz de este hecho durante cuatro fechas por el Colegio de Arbitros, mientras que al futbolista se le aplicó solamente un partido de suspensión. Castrilli también reiteró sus acusaciones al empresario Carlos Avila, titular de Torneos y Competencias, quien en su momento mencionó que “la deuda del fútbol argentino asciende a 250.000.000 de dólares y es manejable”. Castrilli insistió en que “a la posibilidad de hacerse cargo de ese pasivo”, Avila le habría agregado la condición de que pierdan la categoría Huracán, Ferro, Argentinos y Platense. “En un futuro se evaluará qué se hará con el listado facilitado por Castrilli, y seguramente esto va a servir para llevar adelante el pedido de transparencia que se había planteado en el reclamo inicial que hicimos nosotros (por Fair Play) para evitar la violencia en el fútbol y este tema de los árbitros tiene una gran incidencia”, aseguró Romano Duffau. Por otra parte, Ramírez Chagra afirmó que en ningún momento de su declaración Castrilli hizo mención especial a Julio Grondona, sino que “hizo hincapié en episodios que estuvieron involucrados árbitros que después, casualmente, dejaron de dirigir a esos equipos”. Tanto al llegar (a las 9.30) como al abandonar los tribunales (a las 14.30), Castrilli adoptó la misma actitud esquiva ante los periodistas reunidos, mostrándose mucho más solícito con los transeúntes, de los que recibió varias muestras de adhesión. El ex árbitro fue convocado por el magistrado –quien también citó para mañana al técnico de Independiente César Menotti, por las agresiones que sufriera el equipo cuando enfrentó a Estudiantes en La Plata– en la causa en la que la legisladora frepasista Elsa Combes pidió días atrás la intervención del Colegio de Arbitros “por presuntas irregularidades”.
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