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Por Laura Vales  El recorte que
tenía en la boca Marcelo Cattáneo en el momento de su muerte es la primera noticia sobre
su propia desaparición. Fue publicado el 3 de octubre, es decir la víspera de su muerte,
y lleva el título “IBM: desaparece un testigo clave”. Ese título bien podía
haber sido un anuncio de lo que le ocurriría a Cattáneo un día después y sugiere una
ineludible ligazón entre la muerte y el affaire IBM–Nación. Pese al tufillo a
mensaje mafioso que emana el recorte y después de escuchar la conclusión del perito de
parte, los abogados de Marcelo Cattáneo se inclinan a pensar que el empresario se
suicidó aunque dejando un escalofriante mensaje todavía a descifrar.“Nuestro forense no detectó nada que permita sospechar que Marcelo fue asesinado”, dijo a este diario Luis Dobniewski. El perito informó que Cattáneo sólo tenía un pequeño golpe a la altura de la pantorrilla, y que no había otras lesiones en su cuerpo. La conclusión del informe, realizado por Javier de la Parra, está sujeta al resultado de los análisis toxicológicos, a los que el especialista todavía no pudo acceder. El forense trabajó con el cadáver, vio la filmación de la autopsia y chequeó la documentación producida en la Morgue Judicial. Luego explicó a la familia del empresario muerto que el fallecimiento se produjo por asfixia. La posibilidad de que haya sido desmayado para después ahorcarlo se descartó luego de constatar que en la corteza cerebral no había señas de golpes. En el documento, que será entregado hoy a la Justicia, se concluye que “no existen indicios de violencia, de resistencia, o de que la muerte haya sido provocada” por terceros. “Nosotros también creemos que hubo un suicidio –dijo Dobniewski–, porque lo que nos dice el especialista concuerda con el hecho de que Marcelo desapareció voluntariamente”. Los investigadores señalan que el punto central del caso pasó a ser si Cattáneo dejó algún tipo de documentación comprometedora sobre los sobornos del escándalo IBM–Nación. Anoche, el juez Enrique Velázquez y el fiscal de cámara Ricardo Sáenz convocaron a un grupo de peritos para abrir el maletín que Cattáneo dejó dentro de su camioneta. También se está analizando el contenido del disco rígido de la computadora que el empresario usaba en la empresa Baxxor, donde trabajaba. Fuentes cercanas al juzgado de Velázquez revelaron que el presidente de la empresa, Carlos Asensio, declaró ayer que Baxxor fue estafada; existe un faltante de dinero de 360 mil dólares, atribuido a una maniobra de Cattáneo. Asensio contó que la maniobra comenzó en agosto del año pasado, y se descubrió en julio de este año tras una denuncia de los representantes de la compañía Mexicana de aviación. Cattáneo habría ocultado durante meses los reclamos que llegaban desde México. Asensio también habría dicho que Cattáneo manejaba la parte contable de Baxxor y estaba vinculado al estudio encargado de auditar los intereses de la compañía mexicana en Argentina. Asensio y Cattáneo, según las mismas fuentes, iban a viajar e México para aclarar las cuentas el 5 de octubre. Ante la consulta de Página/12, el abogado del empresario muerto negó todos los cargos: “Si fuera cierto, ese dinero tendría que estar en alguna parte –aseguró Dobniewski–. Son casi 400 mil dólares, una suma demasiado alta para que la familia no se diera cuenta. Tendría que haber constancias de gastos, o de inversiones, y el juez hasta ahora no tiene nada de eso”. El abogado recordó que fue el propio Asensio quien negó que Cattáneo manejara cheques o tuviera algún tipo de acceso al dinero de la empresa. “Pero un muerto no puede defenderse, por lo que pueden hacerlo parecer responsable de cualquier cosa”, concluyó. Sin embargo, Juan Carlos Cattáneo admitió ayer a este diario que el 2 de octubre, un día después de la desaparición de su hermano, el presidente de Baxxor se reunió con él y con la mujer de Marcelo y les advirtió sobre la existencia de la denuncia de los mexicanos. El ex subsecretario de la Presidencia tuvo ayer una fuerte discusión con el juez Velázquez por lascontinuas postergaciones para entregar el cuerpo de su hermano. El magistrado le pidió que le diga a Silvina de la Rúa que esta mañana concurra el tribunal para terminar con los trámites pendientes. No es el primer cruce entre los familiares de Cattáneo y Velázquez, que les exige que presenten por escrito cada uno de sus reclamos. Dobniewski no ahorró críticas hacia el magistrado: “Está montando una operación de prensa con el fin de ensuciar el nombre de Marcelo. Lo que Velázquez quiere borrar, y no puede, es que no ordenó su búsqueda cuando aún estaba con vida. Eso es lo que ahora intenta tapar. Y parece más inclinado a investigar a los familiares que a tomar medidas serias para saber cómo y por qué se produjo esta muerte”.
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